Las tradiciones obligan al descrédito de ciertas corrientes y formas de pensamiento. Hasta debe ser una necesidad para la homogeneización cultural.
La época de las tradiciones terminó hace un par de siglos. Murió penosamente cuando en América se tomó conciencia de su poder de identidad.
Aunque algunos creen erróneamente que el desechar esa estructura de trasmisión del conocimiento (la tradición) tiene algo que ver con la tecnología.
"Creencia errónea de que los propios pensamientos, palabras o actos causarán o evitarán un hecho concreto de un modo que desafía las leyes de causa y efecto comúnmente aceptadas"
Aun, y a pesar de todo, nos mantenemos defendiendo a muerte la visión humanista de los dioses griegos que fue resucitada por Freud.
De qué nos sirven dioses que matan el tiempo (pretensión sumamente mortal) frente a un teléfono móvil (un ser totalmente mágico y alejado del hombre común).
Ahora bien, suelen encontrarse barbaridades extremistas bajo las delicias de la libertad. En estos aspectos se presenta la siguiente definición de pensamiento mágico.
"Creencia errónea de que los propios pensamientos, palabras o actos causarán o evitarán un hecho concreto de un modo que desafía las leyes de causa y efecto comúnmente aceptadas".
La cita quedará requerida.