A veces es positivo analizar asuntos graves o complejos de comprender con una nota ligera, ocurrente. Los últimos acontecimientos en el Medio Oriente no se escapan de ello. La telaraña de puntiagudas aristas en el caso de Siria pueden desenfocar al más enfocado y sabio de los analistas políticos.
Los últimos diez años de mi vida profesional los he pasado casi en su totalidad en el Medio Oriente. Comenzando con Egipto y pasando por Jordania, Irak y Libia, entre muchos otros, he pasado experiencias increíbles. El día que Tahir Square explotó con miles de jóvenes demandando la salida de Hosni Mubarak, el ex-presidente Egipcio, yo me encontraba a pocos metros de la misma. Horas después mi preocupación era como llegar sano y salvo al aeropuerto de Cairo y encontrar un vuelo hacia mi casa en Dubái (Emiratos Árabes Unidos)
Hoy vuelvo a Egipto y me rasco la cabeza tratando de entender el pensamiento de algunos. Esto, es casi un imposible. Algunos que antes vociferaron en contra de Mubarak, hoy creen que el ejército ha salvado a Egipto. ¡Obvio que no tengo ni el tiempo ni el espacio para decirles porqué muchos piensan así! Así mismo puedo narrar increíbles experiencias como entrar a Libia con todo el sistema de inmigración sin funcionar. Entrar y salir de ese país sin saber si entré o salí del mismo legalmente. Y sin seguridad alguna en la ciudad. Lo que vi y oí del estado actual y pasado bajo Gadafi, por aquí no lo puedo escribir.
Por igual correr hacia la enfermaría del lugar donde trabajaba en Iraq a curarme los labios rotos por el impacto de un bomba a cientos de metros de donde me encontraba. Hoy, penosamente hay más bombas y más muertos que el 2008 cuando viví allá. Y no se sabe si sus autores son Shias o Suníes de Iraq, irán, Siria o Somalia. Todo un caos.
Analizar las diferencias entre las culturas y conducta de los árabes de Egipto, Túnez, Libia, Iraq, Jordania y Siria o los países del Golfo o el Líbano es un tema de profundo análisis académico. Aun las diferencias entre Omán, UAE, Kuwait, o Arabia Saudita, todos países del Golfo Pérsico son abismales. Ni mencionar Yemen. Todos son árabes pero más se parece un haitiano a un dominicano que algunos de estos árabes entre sí. Cuando viví en Omán por algunos años entendí que hay Árabes y … Árabes. Y por favor recuerde: Turquía e Irán son musulmanes pero no árabes. Así que la telaraña es más compleja.
Por igual en estos últimos diez años he dedicado un tiempo apreciable a la investigación del mundo y cultura árabe así como del Islam como sistema religioso y cultural. Por igual años de análisis del Islam Político. Cada vez lo encuentro más complejo. La diferencia entre un Assad Sirio con un Mohammed Bin Rashid Al Maktoun de Dubái es del cielo a la tierra. Mientras el primero ha destruido media Siria, envilecido a la hermosa Damasco y asfixiado con Sarín a cientos de niños, el segundo ha construido en 30 años uno de las ciudades más impresionante, hermosa, prospera y segura del mundo como lo es Dubái. Y nada que ver con solo petróleo. Es mucho, pero mucho más de ahí. Nigeria y Venezuela tienen petróleo pero son naciones con altas y penosas deficiencias estructurales.
Por lo tanto, para analizar de manera muy, pero muy simple a Siria y el Medio Oriente con una nota jocosa y mordaz, les traduzco este pequeño artículo que fue publicado en la prensa local bajo a firma de K.N Al Sabah para FT:
“Sir, Irán está apoyando Assad. Pero los Estados del Golfo están en contra de Assad!
Assad está en contra de la Hermandad Musulmana. La Hermandad Musulmana y Obama están en contra del General Sisi. Pero los estados del Golfo son pro Sisi! Lo que significa que están en contra de la Hermandad Musulmana!
Irán es pro Hamas, pero Hamas se apoya en los Hermanos Musulmanes! Obama respalda a la Hermandad Musulmana, pero Hamas se opone los EE.UU.!
Los Estados del Golfo son pro EE.UU… Pero Turquía está alineada con los Estados del Golfo en contra de Assad, sin embargo, Turquía está a favor de la Hermandad Musulmana y en contra del general Sisi. Y el general Sisi está siendo respaldada por los Estados del Golfo!
Bienvenidos a Oriente Medio y tengan muy buen día!”
En estos diez años por estos lares una cosa, sin temor a equivocarme, he aprendido del mundo árabe y muchos de sus líderes y es esta: allí donde estén los pozos petroleros, las reservas y tuberías de gas natural, las rutas para su comercio, el dinero para comprarlo, allí estarán sus mentes y corazones. Todo lo demás son solo escenas de la obra teatral llamada Medio Oriente… ¡que ya lleva siglos en escena!