No veo ningún problema en que los dueños de un periódico se concentren en una línea editorial que considere la deuda pública como el componente tóxico del presupuesto del gobierno.  Con la propiedad privada viene el control absoluto para difundir contenidos críticos propios en la forma consideren más conveniente para que el mensaje impacte al lector: Utilizar la primera página con grandes titulares, impresionante línea gráfica en reportajes, colocar en populares secciones consomé o en caricaturas a punto de consumir un legado glorioso. 

Con opiniones de terceros coincidiendo con que deuda es anatema, nada que objetar reciban mayor cobertura.  Decidir los temas que se informan con sesgo o equilibrio también es una opción de la administración o los dueños del periódico. El público no tiene derecho fundamental a recibir análisis equilibrados del periódico escoge leer, mucho menos cuando gasta nada porque lo recibe libre de costo o se conecta a un portal gratuito.  Es tarea propia discernir y comparar diferentes enfoques sobre la deuda pública, o cualquier otro tema, en una oferta que de tan grande abruma.  Una que envidian ciudadanos de naciones con gobiernos no permiten propiedad privada en la prensa o limitan con violencia labor de opinión independiente.

Mientras por ahí ande el asunto, el medio libre es un participante decoroso en el mercado libre de ideas, un requisito indiscutible para llegar a conocer la verdad. Ahora bien, pasa a ser uno facineroso cuando tergiversa documentos de otros que argumentan exactamente lo contrario a su posición contra la deuda. 

Con el titular “Bank of America ve riesgo en endeudamiento externo”, inicia referencia a un informe con éste primer párrafo en su noticia:

“El Bank of America, a través de su división Merrill Lynch, realizó un informe sobre la situación económica de la República Dominicana en el cual indica que la institución considera que la deuda pública es sostenible sin una política de austeridad fiscal severa.” 

En el segundo párrafo publica una cita el reporte en estos términos:

“La sostenibilidad de la deuda pública parece estar al alcance sin severidad en austeridad fiscal. De hecho, los ingresos del Gobierno son menos del 15% del PIB, el más bajo en Latinoamérica y el Caribe, lo que significa que hay espacio para subir los impuestos”, indica el reporte.

Recorté la noticia y fotocopié para entregar en una facilitación sobre crédito público con 35 profesionales. La pregunta fue sencilla para medir lectura comprensiva: Si usted fuera el autor de ese informe, ¿estaría conforme con el titular de Diario Libre sobre la noticia?  Apenas el 40% de los participantes señaló correctamente que al titular le falta la palabra NO.  Lo que hizo el medio fue ignorar lo clave del informe para irse al “pero” o “sin embargo” de los riesgos que el mismo gobierno dominicano incorpora en todo prospecto de oferta de bonos a inversionistas locales o extranjeros. Si 6 de 10 profesionales no lo vieron, qué porcentaje esperar en muestra con otros niveles de educación.

Con los reportajes insulsos del “incremento en la relación Deuda/PIB” cada vez que se ofrecen los balances al final de cada mes, hay que reír y dejar vivir.  La aprobación de un presupuesto deficitario obliga a necesidades de financiamiento que, tal como obliga la Constitución, tienen que presentarse al Congreso para su aprobación en base a un modelo de sostenibilidad de deuda. Es natural que en la mayoría de los meses del año suba el indicador que está proyectado para terminar aumentado con respecto al año anterior. Pero bien, gastar tinta es su problema. 

¿Qué molesta? Todos los meses entrevistan al mismo profesor de economía de la universidad estatal para que repita el discurso alarmista le publican desde enero, cambiando simplemente los datos, pero dándole una calidad que no tiene como vocero de una posición oficial de la UASD sobre el endeudamiento.  ¿Y eso es periodismo serio?

La deuda es parte de un matrimonio trial con fundamento legal en la aprobación de un presupuesto deficitario.  Lo correcto es abordar a los tres participantes (Ingresos, Gastos y Financiamiento) en el escenario ideal donde los unen: la discusión del proyecto de Ley de Presupuesto.  Razones para tener la deuda como chivo expiatorio o cabeza de turco he explicado en otras entregas para el caso de los legisladores, empresarios o partidos de oposición.  El veneno del Libre, misterio por descifrar.