El año 2016, para el sistema municipal dominicana, concluye dejando huellas políticas e institucionales de vulneración e infracción de la democracia local y del desplazamiento formal de una de las estructuras políticas históricas, fruto de su confrontación interna: el PRD. El 2016, año de cambios en la correlación de fuerzas a nivel nacional, provincial y municipal. Un año con pocas novedades en transparencia y en reforma de la Administración Local. El SISMAP Municipal agregó valor a la transparencia. Se reitera o sostiene el nivel de centralización del Estado, y se profundiza la pobreza financiera de los ayuntamientos y juntas de distritos municipales. Durante el 2016, el gremialismo municipal operó con bajo perfil en relación a su incidencia en la agenda descentralizadora y en su relación con la sociedad. Un año que deja endeudamiento exacerbado o de agravamiento de las finanzas municipales.
Democracia municipal baja en el nivel de calidad
Durante el año 2016, una pandemia antidemocrática recorrió y carcomió todo el sistema de partidos dominicanos. No importó la posición ideológica, los intereses que envuelven, las diferencias discursivas, si eran oficialistas u opositores; porque casi todos fueron afectados por la fiebre antidemocrática. La mayoría de las candidaturas fueron designadas por atributos ajenos a la democracia. La influencia de los líderes nacionales, la capacidad económica para financiar la campaña y las encuestas sustituyeron las competencias en función de atributos éticos, formación política y oferta electoral. La democracia perdió en calidad. Una proporción, en extremo alto de candidatos provinciales y municipales señalados y electos, no tenían compromisos de dirección en los partidos, ni vínculos sociales. Por su lado, todos los candidatos a alcaldes y regidores del PRD fueron productos de las negociaciones entre las élites de ese partido y las del PLD. También, muchas candidaturas del PRM se decidieron por afinidad con los dos grupos que luchan por el control político: Abinader e Hipólito. Las candidaturas del litoral progresista y de izquierda se decidieron desde la capital dominicana, sin agotar procedimientos democráticos.
El acuerdo PRM-PRSC dejó el beneficio del reconocimiento del alto financiamiento electoral al partido balaguerista. También, el acuerdo el PLD-PRD tuvo consecuencia en la sobrevivencia presupuestaria del histórico partido del "jacho prendío". Los acuerdos devinieron en una pandemia de la antidemocracia que provocó la exclusión de la participación de las bases de los partidos en los proceso de discusión de las negociaciones. La aspiración para dirigir el Poder Ejecutivo, ganar la presidencia, sacrificó desmedidamente las aspiraciones locales.
PLD preserva hegemonía, emerge el PRM y baja legitimidad del PRD
Aunque el PLD fue el partido con menor porcentaje de alcaldes reelectos, con 22.78%, obtuvo 79 alcaldías, representando el 50% de los 158 municipios dominicanos. Por su lado, el PLD obtuvo 302 regidores. Las cifras muestran que el PLD preservó su hegemonía en el control de la mayoría de las alcaldías y de representación en los Concejo de Regidores. El PRM emergió como la segunda fuerza, desplazando al PRD. El PRM obtuvo 31 alcaldías, lo cual representa el 19.62%, y un total de 266 regidores. El PRD logro ganar 30 alcaldías (18.99%) y 217 regidores. De los partidos tradicionales, el que más bajo porcentaje de alcaldías alcanzó fue el PRSC, con 13 (8.23%). Este partido, el PRSC, logró ganar un total de 173 curules para regidores. El PRD por esfuerzo propio, según el boletín 14 de la Junta Central Electoral, sólo obtuvo una proporción superior de votos, en relación al PLD, en el municipio de Consuelo. En el resto de municipios ganados tuvo un bajo desempeño en la captación de votos propios. Quiere decir, llegan a una posición electiva con baja legitimidad municipal.
El BIS y la UDC obtuvieron 1 alcaldía, cada uno. La novedad del resultado electoral fue la victoria alcanzada por la APD y el Movimiento Independiente de Puñal, con 1 alcalde, respectivamente. El Frente Amplio obtuvo una alcaldía sin alianza; no obstante, el alcalde electo optó por el transfuguismo, abandonando y yéndose al PRD. Una lección para el Frente Amplio, que incorporó a su boleta un actor político sin la necesaria solidez ideológica y ética política. Este es el riesgo de reclutar tránsfuga. Por su lado, Alianza País, obtuvo ganancia de 1 distrito municipal. Este último mapa electoral expresa que por primera vez en la historia electoral dominicana se produce un fenómeno, aunque todavía pequeño, de emersión de fuerzas municipales con independencia y diferencia de los partidos con tradición en el control de los poderes públicos.
Finalmente, las alianzas, pactos, negociaciones que operaron como repartos y las encuestas para elegir candidatos, también, devinieron en la presentación de candidaturas a regidores en cada boleta electoral que no permitiría hegemonía partidaria. El desenlace en el tiempo surtirá efectos, más negativos que positivos, en la gobernabilidad de los Concejos de Regidores, como consecuencia de los comportamientos históricos de los integrantes de los órganos legislativos a nivel municipal; caracterizado por un ejercicio legislativo de espalda a la población y a sus propios partidos.
Escenarios con resultados electorales heterogéneos
El desenlace electoral del año 2016 es una manifestación de que lo local no se superpone o está completamente hegemonizado por las decisiones nacionales. Danilo Medina, candidato del PLD, ganó las elecciones con el 62% de los votos. Pero ese resultado fue muy diferente, desigual y muy heterogéneo en una parte importante de municipios donde perdió el PLD. El caso más emblemático fue el Distrito Nacional, capital dominicana, donde el candidato del PRM obtuvo el 57%, desplazando del poder municipal al PLD que tenía 14 años dominando esa plaza. En esta tendencia se montó el voto en San Francisco y La Vega, en cuyos municipios el PRM y aliados obtuvieron 55% y 61% de la simpatía. Una alianza opositora en Santo Domingo Este, uno de los municipios más importante demográfica y económicamente del país, pudo desplazar al candidato del PLD, el cual obtuvo el 44% de simpatías.
Gremialismo municipal neutralizada su incidencia política
La coyuntura electoral, las elecciones internas y la ausencia de contrapesos políticos y sociales se constituyeron en factores del entorno institucional para limitar el desarrollo de la agenda de las instituciones gremialistas como FEDOMU, FEDODIM, ASODORE y UNMUNDO. Durante los 12 meses del año 2016 hubo muy poca novedad en la incidencia política de estas instituciones, aun teniendo y existiendo una agenda pendiente de fortalecimiento de la institucionalidad municipal y de reforma del marco jurídico; expresado, esto último, en la necesidad de jugar un papel más beligerante en los debates de la ley de Ordenamiento Territorial y Uso de Suelo, y en la legislación referida a tránsito, transporte y movilidad urbana, y en alianza con la sociedad civil. Ambos instrumentos legales calificados como estratégico para el porvenir de los gobiernos locales, pero con algunos contenidos que amenazan su autonomía.
El PLD, partido que domina los tres poderes legalizados por el voto popular, no tuvo contrapeso de calidad en las instituciones gremiales. El PRM, principal fuerza de oposición, jugó y juega el papel de commodity a la hegemonía política del PLD-PRD. El resultado de la fortaleza de FEDOMU, y de las otras entidades del asociativismo, está determinada por los logros en el fortalecimiento de la autonomía financiera, económica, administrativa y política; y por su propia democratización. Le hace bien a FEDOMU, FEDODIM, ASODORE y UNMUNDO disponer de contrapesos políticos en su interior y complementariamente disponer de un control social que observe su desempeño institucional en juicios de valores sobre su eficiencia, eficacia, ética y transparencia.
FEDOMU y las demás gremiales disponen de tácticas y estrategias para cumplir su papel, las cuales tienen que complementarse con voluntad, decisión y capacidad política, para poder conquistar parte de la demandada autonomía y descentralización de la función pública. En contrario perderían mucha legitimidad.
La Regla de Oro perdió espacio
En agosto 2016 se intentó reeditar el Pacto por la Gobernabilidad y la Democracia, que le llaman Regla de Oro. Esta denominada regla perdió vigencia y espacios; porque el liderazgo local, fundamentalmente opositor y de parte del litoral oficialista, decidieron tomar el camino de la autonomía en las decisiones de sus municipios. En el pasado la Regla de Oro produjo un conjunto de rupturas a la institucionalidad municipal, las cuales contravenían principios de autonomía política, de descentralización, concertación local, representación, independencia de los órganos del gobierno local y de inclusión democrática de las minorías.
SISMAP Municipal agrega valor a la transparencia
El Sistema de Monitoreo a la Administración Municipal (SISMAP Municipal) agregó valor a la transparencia de los ayuntamientos dominicanos. Con este Sistema se le da seguimiento a 50 ayuntamientos en su cumplimiento de varios marcos jurídicos mandatorios de la transparencia, la participación, la planificación y la rendición de cuentas. El año 2016 cierra con 5 ayuntamientos con valor en el ranking de cumplimiento entre 90%-95%; 7 ayuntamientos con valor comprendido entre 80%-89.96%; 12 ayuntamientos con valor dentro del rango de 70.92%-79.17%. Con menor desempeño se registra en el portal un total de 26 ayuntamientos, más del 50%, con valores comprendidos entre 18.21%-69.69%.
El monitoreo realizado por instituciones de la Administración Pública y de los órganos de control no ha sido complementado por parte de las organizaciones de la sociedad civil, estas, aún teniendo oportunidad de jugar un papel de monitoreo social en los territorios, porque el SISMAP brinda de modo abierto todas las evidencias o documentaciones. Es imperativo crear una base de legitimidad social que acompañe la calificación de la legalidad por las entidades públicas y de los incentivos económicos a los que mejores desempeños tuvieren. Ayuntamiento-monitoreo público-participación social es un continuun que permite dar valor a lo público de modo transparente e inclusivo.
Cámara de Cuentas desnuda déficit en transparencia
En el 2016, en el reporte que hizo la Cámara de Cuentas al Congreso Nacional se reveló que durante el ejercicio fiscal 2015, el 38.05% de entidades municipales no entregaron ejecución mensual, el 39.28% que no entregaron informes trimestrales y el 13.18% que no entregaron presupuestos. En el reporte de informes trimestrales recibidos por región, los mayores índices de entrega correspondieron a Yuma con un 73.68%, Enriquillo con el 73.08% y Ozama o Metropolitana con el 70.31% del total a recibir. Las de menor porcentaje fueron El Valle con 49.32%, Cibao Nordeste 52.56% y Valdesia con el 56.44%. Estas cifras colocan a gran parte de los componentes del sistema municipal en estado de desacato a Ley de Cámara de Cuentas.
En los balances de años anteriores se ha advertido sobre el estado de anomia en que operan los gobiernos locales y la falta de régimen de consecuencia. La reiteración es un indicador de que los órganos de control cohabitan con los déficits institucionales que corroen el funcionamiento adecuado de las entidades que gobiernan en los territorios dominicanos.