Antes de que pienses que el título está mal, déjame y te cuento que toda tu vida has estado respirando de manera inconsciente. Respirar para ti quizás no sea la gran cosa, aunque claro, si no lo haces te mueres. Sabes el beneficio de respirar, cuando inhalas permites que el oxigeno entre en tus pulmones y cuando exhalas botas el dióxido de carbono.
Respirar es algo sencillo, tal vez sea por esta misma razón, que no le demos tanta importancia. El cuerpo sabe cómo debe respirar para asegurar su supervivencia básica.
Ahora… ¿Sabes qué es la respiración consciente? Si no sabes, te explico.
Como lo dice su nombre es el arte de respirar conscientemente. Te pongo un ejemplo sencillo, imagínate que uno de tus amigos está nervioso o ansioso por algo que pasará en el futuro inmediato, tu para ayudarlo le dices "oye tranquilo, respira" esa invitación que le acabas de hacer fue directamente a la respiración consciente. Cuando nos enfocamos en nuestra respiración y decimos "inhala, exhala" o decimos "voy a contar hasta 3 para inhalar y en 6 exhalo" eso también es respiración consciente.
Tu dirás… ¿Para qué me sirve la respiración consciente? Para muchas cosas.
Una buena forma de reducir los niveles de ansiedad es a través de la respiración consciente. Gracias a la buena circulación del oxígeno en nuestro cuerpo se favorecen diversos procesos fisiológicos.
Por ejemplo, el aparato digestivo es uno de los grandes beneficiados. Si se practica la respiración consciente se puede experimentar una mejora en los problemas digestivos.
La respiración consciente te puede ayudar a liberar las tensiones acumuladas en el cuerpo. El ritmo lento y pausado impuesto en los ejercicios de respiración, permite bajar la velocidad del corazón. Esto influye directamente en una flojera muscular.
Aunque no lo creas, los ejercicios de respiración permiten aprovechar la vía parasimpática del sistema nervioso autónomo. Cuando estamos con mucho estrés, el cuerpo disminuye las capacidades fisiológicas para potenciar las capacidades defensivas. Un ejemplo de esta disminución es la capacidad digestiva.
Esto significa que con la relajación y la eliminación de tensiones que se obtienen controlando la respiración, nuestro cuerpo pierde peso de manera más rápida.
Cada vez que respiramos de forma consciente estamos mandando señales al cerebro para que cambie una función que hace de manera automática. Esto fortalece la rama parasimpática (digestión y descanso), lo que repercute en la generación de regulación del cortisol, la hormona del estrés.
La respiración es ideal para el bienestar mental. Respirar de manera controlada permite anclarte al aquí y al ahora, dominando tus pensamientos. Este efecto poderoso de la respiración consciente es lo que acerca esta práctica al mindfulness y a la conciencia o atención plena. La respiración consciente controla nuestras respuestas ante unos sentimientos y emociones que a veces nos pueden dominar.
Sí, la respiración consciente tiene muchos beneficios, y los que te mencioné no son los únicos, hay muchos más.
Practicarlo es sencillo, te compartiré algunas formas de hacerlo.
Empieza regularizando tu respiración: toma aire por la nariz y expúlsalo por la boca. Cuando hayas acabado con la expulsión del aire, espera a iniciar, cuando tu cuerpo lo pida, retoma la inhalación.
Cuando ya no puedas inhalar más, abre la boca y lentamente, con la mandíbula relajada suelta todo el aire y espera hasta que necesites respirar de nuevo. Tras varias repeticiones de este ejercicio, deja que el tiempo entre respiraciones sea un momento de relajación total.
Otra manera en la que puedes realizar respiración consiente, para cuando te sientas muy estresado es la siguiente, tápate uno de los orificios de la nariz y respira poco a poco por el orificio que tienes libre contando hasta ocho. Aguanta el aire 4 segundos, tapa el orificio por donde inhalaste y exhala por el que tenías tapado anteriormente contando hasta 8. Espera otros 4 segundos y ves cambiando de orificio con cada exhalación.
Si eres muy inquieto, al inicio te puede costar un poco realizar estos ejercicios, pero como dicen "La práctica hace al maestro".