1.- De la misma forma que hago del conocimiento de la opinión pública nacional e internacional, cualquier hecho que me motiva perturbación, dejo saber aquello que me genera satisfacción y me impulsa a compartirlo con los demás, porque hace bien transmitir lo que divierte el alma.
2.- Me he sentido sumamente bien porque mi amiga, la licenciada Eunisis Vásquez Acosta, acaba de presentar sus credenciales como embajadora Extraordinaria y Plenipotenciaria de la República Dominicana, ante la Santa Sede. La misma alegría que he sentido, de seguro le ha llegado a lo mejor de nuestro país y en particular a los que tenemos la dicha de conocer de las virtudes cívicas, ciudadanas, éticas, morales y cristiana que acompañan a la licenciada Eunisis Vásquez Acosta.
3.- Con la presencia de la licenciada Eunisis, nuestro gobierno y el pueblo están dignamente representados, porque ella siempre ha exhibido correcto proceder como ciudadana, magistrada y ferviente cristiana.
4.- Aprovecho la ocasión para felicitar a Eunisis, a su hijo Eduardo, y demás familiares, a la vez que a ella le deseo los mejores parabienes que serán de bien para nuestro país y la Santa Sede.