Aunque está de moda el tema sobre el devenir del BREXIT, considero que también se están desarrollando eventos que pudiesen tener más impacto, sobre la economía mundial, que este impasse surgido en la Comunidad Europea.

El mundo está siendo testigo, de primer orden, de un deslizamiento de las plataformas tradicionales de Poder de Occidente hacia las emergentes del Oriente. Este desplazamiento ha tenido sus orígenes en la recesión global originada por el fracaso de los sistemas financieros, precisamente de Occidente. Esta crisis sistémica condujo a una desestabilización en el equilibrio de la economía global y a la desinterpretación de las “señales” que nos enviaban los mercados durante este proceso. De ahí que, la República Popular de China(RPC) surge como el ‘ungüento y engrudo” para los países de las economías occidentales debido a que el “León Asiático” estaba ya preparado para un cambio en sus paradigmas sociales, económicos y financieros. Veamos:

Antes del año 1994, la RPC tenía un sistema cambiario dual; por un lado, existía una tasa fija para las operaciones en divisas del Estado y, por otro lado, un sistema de intercambio restringido para las importaciones básicas, no especulativas, tipo FOREX. Muy parecido al que teníamos en la década del 1960/1970 en nuestro país. Esta dualidad llevo al surgimiento de un Mercado Negro de divisas y los comerciantes chinos, así como los empresarios emergentes, protestaron enérgicamente debido a que este sistema dual de divisas imponía serias trabas a la importación de bienes y servicios, en detrimento de la Oferta Interna de los mismos.

Para mediados del 1994, el Gobierno de la RPC unifico los tipos de cambio estabilizando la Oferta Monetaria y los rangos cambiarios hasta el año 2005. Es a partir de este año, que el Gobierno Chino inicia una “indexación” de su nueva moneda, el RENMINBI (RMB), con el Dólar Estadounidense. Este nuevo enfoque monetario promovió una nueva política económica, propiciando así, una oleada de inversiones foráneas y de reinversiones nativas en el tren industrial, financiero y de servicios.

A partir del 2005, la valorización de esta indexación varía según lo dicten las leyes de Oferta y Demanda. Sin embargo, en el lustro2007-2012, la tasa de intercambio subió a niveles que afectaron las exportaciones chinas, llegando a niveles de hasta el 31%. De ahí que:

a)-Las señales que enviaban los mercados internacionales no fueron bien interpretadas por La Autoridad Monetaria China. El Mercado de bienes y servicios estaba siendo impactado por los desbalances, en su poder adquisitivo, de las economías emergentes. Es en este momento que China opta por subvaluar su moneda, para incrementar las exportaciones y mantener niveles de empleo que garanticen un consumo masivo de bienes y servicios. Este accionar también aumento sus reservas monetarias a niveles exorbitantes.

b)-Debido a la “indexación”, las autoridades Monetarias se vieron en la necesidad de intervenir en la compra masiva de Oro y Divisas para garantizar su acceso a los puestos de bolsa y no verse afectados por la especulación de divisas. De ahí surge la “ofensiva” en la compra de los Bonos del tesoro norteamericano, llegando a poseer casi el 30% del total de la Cartera de Emisión de dichos valores.

Producto de estos enfoques monetarios y financieros, la RPC, invierte más del 42% de su PIB en la sostenibilidad económica y expansiva del país; es en la actualidad el país que tiene el porcentaje más alto en este renglón. De seguir esta tendencia, para el 2035, la RPC representara el 20% de la producción mundial en bienes y servicios.

Cuando vemos estas cifras tan impactantes y reveladoras, se nos ocurre que el Reino Unido, bajo este nuevo “status” debería acercarse a la RPC y tratar de convertirse en el epicentro económico y financiero entre Asia y Europa.