“Santo Domingo, 5 may El derrumbe del Hotel Francés en la noche del sábado mantiene hoy preocupadas a muchas personas(…) La edificación era parte del complejo del Hospital San Nicolás deBari, primero de América, construido a principios del siglo XVI, y formaba parte del valioso patrimonio histórico y arquitectónico de esta nación antillana”.

http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&idioma=1&id=3776521&Itemid=1

Cuando se cae un edificio de valor patrimonial, se nos derrumba un trozo de historia, se nbos pierde para siempre, un pedacito del alma de la nación. Cada obra arquitectónica atesora en sí misma, valor artístico, constructivo, social/comunitario/ histórico. Detrás de un derrumbe, hay años de falta de conservación del patrimonio histórico, con responsabilidad y sistematicidad. Hay falta de una acción gubernamental conjunta. Los sectarismos hacen que cada uno atienda su “finquita” y excluya a los demás por manejar ellos y nadie más que ellos, el dinero de la inversión. Tristemente, el derrumbe de un edificio de valor patrimonial, desgarra a la cultura nacional. Nos simboliza el estado carencial que tenemos. Nos falta coordinación interinstitucional. ¿¡Y quién dijo que el Ministerio de Turismo puede dirigir un proyecto de restauración urbanística/arquitectónica, en la Zona Colonial?! Ni esas son sus funciones ni tienen los expertos. Por Ley No 318 de Patrimonio, toda obra de conservación y restauración de bienes patrimoniales, en este caso, de Sitios y Monumentos, es responsabilidad del Ministerio de Cultura.  Todo presupuesto, venga del BID o de donde venga, deberá ser el Minisyerio de Cultura con su red de expertos quien lo dirija y ejecute. Es obvio. Aunque en este sentido considero que la Oficina de Patrimonio Cultural se le debe dar mucha más autoridad y autodeterminación de la que tiene. Debiera ser una Oficina Rectora del Patrimonio Nacional, una oficina equipada con todos los recursos técnicos y los arqueólogos y demás profesionales del área. Debiera ser, y valgan las diferencias, como Leonel Fernández creo el Instituto de Cine que no se subordina a ningún Ministerio, tiene personalidad jurídica propia. Una Oficina técnica y no política, con dependencia del Poder Ejecutivo, no de ningún ministerio, aunque con vínculos metodológicos con Cultura y Medio Ambiente. Una Oficina con presupuesto para formación y capacitación de personal especializado que es una educación carísima; con un presupuesto para realizar investigaciones/excavaciones y acciones de conservación y restauración de bienes patrimoniales. Necesitamos una Oficina Nacional para la Conservación y Protección del Patrimonio Dominicano, con autodeterminación y presupuesto. Por más que un experto de Cultura diga que esa excavación técnicamente no se puede hacer, el Ingeniero hace caso omiso, porque a él lo contrató otro Ministerio y no tiene por qué obedecer a un técnico de Cultura.

Se necesita una Oficina que implemente las leyes de la protección del Patrimonio Nacional para que los depredadores y comerciantes no nos roben nuestros bienes patrimoniales y por las aduanas de este país no se sigan exportando sin límites ni autorizaciones, las más preciadas obras patrimoniales dominicanas. Una Oficina del Patrimonio Dominicano, con expertos bien formados y actualizados. Una oficina con poder de convocatoria  a los ministerios implicados para trabajar en Comisiones Conjuntas en proyectos específicos. Una Oficina con un cuerpo de inspectores que pongan multas a los irresponsables, agresores y traficantes de nuestros bienes patrimoniales. Un país con la riqueza patrimonial que tenemos no puede dejar a merced de funcionarios de turno, insensibles e incapacitados en estos temas y peor, enfocados en su propia campaña presidencial,  la conservación del Patrimonio Nacional.

Hay pérdidas irreparables. Por más que traten de restaurar, nunca van a ser igual. Se utilizarán otras piedras, no las originales, los materiales serán otros. Si se erigiera, otra vez, el Hotel Francés, si llegara a reconstruirse ese edificio que se nos fue, serán otros materiales, otras técnicas, otra mano de obra.  Perdimos un bien de alto valor histórico que no recuperaremos jamás.

La Ciudad Primada de América, Patrimonio de la Humanidad merece ser atendida palmo a palmo con responsabilidad, pasión y dedicación, es nuestra historia, los cimientos de la historia de Nuestra América la que está en peligro. El agradecimiento eterno a las pasadas generaciones por su legado, el compromiso nuestro de conservar estos tesoros patrimoniales para las generaciones venideras.

“Reglamento No. 4195 sobre la Oficina de Patrimonio Cultural. G.O. 9159

JOAQUIN BALAGUER Presidente de la República Dominicana NUMERO 4195 VISTO el artículo 14 de la Ley No.318, del 14 de junio de 1968;

En el ejercicio de las atribuciones que me confiere el artículo 55 de la Constitución de la República, dicto el siguiente

R E G L A M E N T O

Artículo 1.- La Oficina de Patrimonio Cultural tendrá como función principal la realización, coordinación y ejecución de las iniciativas y planes que se llevan a la práctica en la República Dominicana, relacionadas con el Patrimonio Monumental y el Patrimonio Artístico de la Nación, ambos definidos en la Ley No.318, del 14 de junio de 1968”. http://www.wipo.int/wipolex/es/text.jsp?file_id=242438

“Ley N° 318 sobre el Patrimonio Cultural de la Nación

Artículo 3.- Será misión de la Oficina de Patrimonio Cultural, la elaboración de los planes de conservación, consolidación y presentación de los monumentos y conjuntos monumentales del país y edificios que sin estar declarados monumentos nacionales puedan afectar la realización de los planes elaborados, así como la inspección de éstos. La Oficina de Patrimonio Cultural realizará anualmente planes nacionales para la realización de obras de conservación de monumentos y yacimientos arqueológicos, así como excavaciones periódicas en lugares conocidos por descubrir, en cuya elaboración intervendrá la Comisión Ejecutiva. Es asimismo misión de la Oficina de Patrimonio Cultural la realización del inventario de la riqueza monumental, artística y arqueológica del país debiendo realizar en etapas sucesivas el inventario, el catálogo monumental y la carta arqueológica” http://www.wipo.int/wipolex/es/text.jsp?file_id=235274