Uno de los mayores triunfos del manchado gobierno de Medina es el servicio del 911. En eso estamos claros. Este importante servicio telefónico de asistencia inmediata en casos de emergencia en accidentes es vital para en cualquier sociedad. Por supuesto, en una sociedad donde al malherido, víctima o enfermo se sienta seguro de que será atendido en clínicas u hospitales debidamente equipados y con personal profesional preparado.
A pesar de este gran logro del gobierno de Medina, muchos hospitales de Santo Domingo, Santiago y Puerto Plata, donde opera de momento el 911 adolecen de equipos, de condiciones hospitalarias, de acondicionamiento y trato humano.
Los hospitales públicos de Santiago y muchos de Santo Domingo se están cayendo a pedazos. El gobierno de Medina lo sabe pero la solución es nula o si existe, es muy lenta. Falta equipos, remozamiento y un mejor y cualificado personal. Son muchas las personas víctimas de los mismos hospitales donde los llevan.
El uso del 911 salva vidas. El lugar donde se encuentran ubicadas estas oficinas en ambas ciudades son muy modernas, equipadas pero el asunto radica en los hospitales donde se lleva a la víctima.
En ese sentido, el gobierno dormido en su gran logro del 911, invierte millones y millones de pesos en acondicionar el servicio, pero no acondiciona donde llevan al enfermo, a la víctima de cualquier accidente, quien a su vez se topa con grandes dificultades cuando llega al centro de salud.
Muchos hospitales públicos del país son una verguenza nacional. Dan pena. Somos una sociedad altanera, con un gobierno que apuesta e invierte en lo equivocado, en hospitales de carácter privado como Cedimat que recibe millones del presupuesto nacional cada año y donde acude el grueso de la población, a esos hospitales populares poco se acuerdan. Y ni hablar de los hospitales públicos de la región Sur, ahí es que el asunto es deprimente.
El desarrollo de un país no solo pasa por un 911, por carreteras cuestionadas y obras sobre valuadas, el real "desarrollo" de una sociedad se basa en brindar a sus ciudadanos servicios públicos con garantías reales de servicio, de equipamiento en sanidad y educación. Por mucho 911 que haya continuamos siendo un país donde si usted no tiene dinero en su cuenta bancaria para pagar su salud, usted muere porque en este país domina la mafia de la sanidad privada sobre la inexistente sanidad pública.
Mucho 911 y ningún gobierno se ha preocupado por dar atención a las familias con hijos o familiares dependientes, con alguna condición o enfermedad que se les dificulte trabajar. ¿Cuándo se hablará de este tema?