El 22 de junio, la iglesia católica conmemora el Día de Santo Tomás Moro, patrón de los políticos y gobernantes,
Tomás Moro (1478-1535) fue beatificado en 1886, por el papa León XIII, (El mismo que publicó la encíclica Rerum Novarum), y canonizado por la iglesia católica como santo en 1935, junto con Juan Fisher. La iglesia anglicana lo considera un mártir, incluyéndolo, en 1980, en su lista de santos y héroes cristianos.
El 31 de octubre de 2000, el Papa Juan Pablo II proclamó santo patrón de iglesia católica, para los políticos y los gobernantes, a Tomás Moro, en respuesta a una idea del expresidente de la República Italiana Francesco Cossiga surgida en 1985, y presentada como petición formal el 25 de septiembre de 2000 con el aval de centenares de firmas de jefes de Gobierno y de Estado, parlamentarios y políticos.
El nombramiento del Papa, contenido en un motu proprio del 31 de octubre del 2000, no podía llegar en un momento más oportuno.
La idea, en efecto, según explicó uno de sus inspiradores, el ex presidente de la República italiana Francesco Cossiga, surgió en 1985 por parte de un grupo de políticos y estudiosos, reunidos en el ámbito de la Asociación Internacional de Amigos de Tomás Moro. la figura de él refleja de modo nítido el ideal de laico católico.
El propio Cossiga puso de relieve que Tomás Moro “fue laico de vocación, no como fruto de la no-vocación religiosa, sino como elección”.
También el cardenal Roger Etchegaray, presidente del Comité Central del Gran Jubileo, describió al “autor de la extraordinaria Utopía como alguien que cultiva las artes, pero lleva el cilicio.
Tomás Moro fue un hombre inmerso en los asuntos públicos, padre atento de sus hijos, y parroquiano de misa diaria. Políticos de todas las tendencias, lo cual lo convierte en modelo de padre de familia.
La petición, para que Tomás Moro fuera el patrón de los políticos y gobernantes fue presentada al papa el 25 de septiembre del 2000, por el expresidente de Italia Francesco Cossiga y el senador socialcristiano venezolano Hilarión Cardoso quienes presentaron al Papa la petición formal.
Entre los firmantes de esta petición había personalidades de diversa orientación política, cultural y religiosa, como expresión de vivo y difundido interés hacia el pensamiento y la conducta de este insigne hombre de gobierno. por el testimonio de Tomás Moro, ofrecido hasta el derramamiento de su sangre, de la primacía de la verdad sobre el poder, santo Tomás Moro es venerado como ejemplo imperecedero de coherencia moral.
La figura de Tomás Moro es reconocida como fuente de inspiración para una política que tenga como fin supremo el servicio a la persona humana. “El hombre no puede ser separado de Dios, ni la política de la moral”.
La petición al Papa fue hecha por tres presidentes italianos; Francesco Cossiga, Scalfaro y Leone, y otros políticos como Giulio Andreotti, figuran jefes y ex jefes de Estado de países como Chile, Colombia o la Confederación Helvética, el primer ministro de Portugal, el príncipe Rainero y su hijo Alberto, el ex primer ministro italiano D’Alema, etc. El Parlamento polaco fue el que aportó un mayor número de firmantes.
El texto del Papa glosa esas mismas ideas: “Refiriéndome a semejantes ejemplos de armonía entre la fe y las obras, en la Exhortación apostólica postsinodal Christifideles laici escribí que ‘la unidad de vida de los fieles laicos tiene una gran importancia. Ellos, en efecto, deben santificarse en la vida profesional ordinaria.
Esta armonía entre lo natural y lo sobrenatural es tal vez el elemento que mejor define la personalidad de Tomás Moro, el gran Estadista inglés. Él vivió su intensa vida pública con sencilla humildad, caracterizada por el célebre ‘buen humor’, incluso ante la muerte”. (A este propósito, el cardenal Etchegaray recordó la famosa frase pronunciada en el mismo patíbulo: “Ayúdame a subir las escaleras -dijo al verdugo-, que de bajar ya me encargo yo”).
A pesar de ciertas limitaciones, afirma el Papa, “fue precisamente en la defensa de los derechos de la conciencia donde el ejemplo de Tomás Moro brilló con intensa luz. Se puede decir que él vivió de modo singular el valor de una conciencia moral que es ‘testimonio de Dios mismo, cuya voz y cuyo juicio penetran la intimidad del hombre hasta las raíces de su alma’
El Papa reitera también la idea de que “el hombre es criatura de Dios, y por esto los derechos humanos tienen su origen en Él, se basan en el designio de la creación y se enmarcan en el plan de la Redención. Podría decirse, con expresión atrevida, que los derechos del hombre son también derechos de Dios”.
Santo Tomás Moro dio la vida por defender una Iglesia libre del dominio del Estado. A la vez estaba defendiendo también la libertad y el primado de la conciencia del ciudadano frente al poder civil.
Entre las razones que favorecieron la proclamación de santo Tomás Moro como Patrono de los Gobernantes y de los Políticos, el Papa menciona “la necesidad que siente el mundo político y administrativo de modelos creíbles, que muestren el camino de la verdad en un momento histórico en el que se multiplican arduos desafíos y graves responsabilidades”.
Los documentos históricos muestran que Tomás Moro “se distinguió por la constante fidelidad a las autoridades y a las instituciones legítimas, precisamente porque en las mismas quería servir no al poder, sino al supremo ideal de la justicia. Su vida nos enseña que el gobierno es, antes que nada, ejercicio de virtudes”, la explicación del Papa: la santidad de Moro, “que brilló en el martirio, se forjó a través de toda una vida entera de trabajo y de entrega a Dios y al prójimo”. Lo que se puede imitar, al menos, es su vida.
En la República Dominicana existe el Grupo Santo Tomás Moro, que tiene como presidente a Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, arzobispo emérito de Santiago de los Caballeros, su secretario ejecutivo es José Armando Tavarez, y miembros a Carlo Burgo y José Gómez Cerda, grupo que realiza diversas actividades de educación política para jóvenes de ambos sexos.
El grupo Santo Tomás Moro, de República Dominicana realizará mañana, martes, 22 de junio, a las 6 de la tarde, un webinario internacional, titulado SANTO TOMÁS MORO. EL EJEMPLO DE UN LAICO EN LA VIDA POLÍTICA, con la participación de Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, fundador del Grupo Santo Tomás Moro, y el ingeniero Humberto Treviño, del Centro Político y Cultural, de México, será por medio de una reunión virtual vía Zoom.