Una de las cualidades del aburrimiento nacional, sería en primer término, hacer espectaculos de mal gusto para recordar a los héroes nacionales. La estampa ramplona de esos homenajes, la pobreza y el famélico entusiasmo, me hacen temer que esos 200 años de Juan Pablo Duarte sean más lo mismo y quizás peor, me explicaré sin medir emociones o riesgos, como es usual.
El editorial de hoy en Acento. Com, advierte con presteza y de modo muy delicado y hasta sutil, la importancia
de este bicentenario duartiano. Hace una cronología sobre los lastres y las fechas y sugiere acciones y vigilancia a la población entera.
Bien, en la tradición dominicana de las celebraciones patrias hay una manipulación permanente impuesta por la dictadura de Trujillo. El dictador atento a su megalomanía subordinaba las celebraciones a los humores de su propio ego y calendarios oficiales, sometiendo fechas de santorales y participaciones folkloricas públicas a su arbitrio y deseo.
Se puede comprender : las actividades patrias y efémerides son referente de memoria e historia para la población, han sido el motivo de grandes convocatorias populares, captadas por los medios para su promoción debida.
Así las cosas, para las dictaduras el reordenamiento de fechas y usos de festejos, son un motivo de celo y control.
El concepto del culto a héroes y fechas en la República Dominicana, como en el resto de América Latina, se ha convertido en una formalidad que administran instituciones dedicadas a preservar y difundir estos temas.
De tal suerte, que cuando hablamos de honrar y recordar, ya eso pertenece al rubro de la burocracia y el cumplimiento, hartazgo de rutina y bostezo y cuando fuere necesario : más círco que pan ( pan no queda), porque entre colores, sables y uniformes vistosos, música marcial obliga, la gente olvida de momento sus grandes miserias cumplieendo con ritual de mirones de calle con una accidental risotada al aire, que a veeces calma suspiros de angustias y sogas colectivas al cuello, que eso abunda como que el Divino niño existe…
Bicentenario natal de Juan Pablo Duarte, gran oportunidad de dicursos y fabulosas mentiras, creernos un un excelente guión de la patria que se "ha construido", hacer como que todo está bien, que para 200 años, debimos estar " peor ", coño que progreso!!…
Entre fantasía y vítores, se buscará alguna forma de integrar masas, porque un bicentenario natal de Duarte sin bullicios ni funditas, sin banderitas de papel cuadradas, bien recortaditas en los bordes, eso sí , mucho confites tricolores, recordatorios como escapularios de los jóvenes vírgenes de San Salustiano martir y en medio de todo jolgorio de seudo folklore, la apariencia de una rícula " unidad nacional ", orgullo vano de los ultras nacionalistas, a quien la sangrada patria contemporánea, les ha pagado muy bien sus histerias en el juego público de la historia.
¿ Cuál es mi punto de análisis ?…
Que la sola composición de la llamada Comisión del Bicentenario de Duarte nos indica con claridad meridiana, que esa celebración tendrá el perfil burocrático requerido, un poco como las dictaduras moldean esos actos, a los cuales tratan de sacarle la partida política y mediática adecuada, sin lugar a dudas…
Obviamente, el bicentenario natal de Duarte puede dar motivos también a otros debates, menos vetustos y mejor encaminado que la encorcetada Comisión, como por ejemplo : ¿ Vamos a seguir inventando aquel Cristo de la Libertad, tan languido como su autor , que posiblemente en su aureo discurirr no le fue posible el humano apremio de actividad fisiológica alguna ?…
Juan Pablo Duarte y su historia, serán más humana y mejor aceptada, en la medida en que dejemos los malditos cuentos de caminos, las beatificas loas que le semejan a los santos de cera de los empolvados altares nacionales.
De igual modo, sería atendible no fuñir más con la historia del desengaño de la novia y la ventana, cuando regresaba de Aruba el patricio, entre otras historias rocambolescas y de profundo humor involuntario.
O el retoque militar de improbable acerto " : General Juan Pablo Duarte ", que nunca falta.
En otras palabras, no espero nada nuevo de una Comisión que además deja todo para el último momento, moldeada según gusto y trama de quien firmó el decreto que la instituye…
En fin, otro coñazo para Duarte, el mismo de mirada de cielo en el parquecito, donde los jóvenes en nombre del mismo Duarte, estan vigilados todas las noches del mundo, para no ofendan a Duarte…
¿Anticipo premonitorio de la celebración del Bicentenario Natal de Juan Pablo Duarte ?… Le manda huevos…
NOTA DEL AUTOR: En su momento, habrá que tratar el tema de los imaginarios visuales de nuestros patricios.
Ello implicará analizar a fondo el tema étnico y las variaciones que los "artistas" han hecho de las fotos llamadas "originales", patrón visual que al recibir retoques según versiones, llega un momento que el imaginario colectivo lo que hace es no recordar las imágenes, porque no tiene un patrón visual fijo.
En este tema, lo racial según estigmas o gustos, moldea deseos, imposición de imaginarios y otros detalles de las efémerides manipuladas…
Por esta razón elegí estas dos fotos de un imaginario interesante: Un Duarte que aparenta general de la guerra de secesión americana de 1861 y otro pretendido Duarte sicodélico, hay para todos los gustos…(CFE)