Amable lector, Flann O’Brien fue un escritor irlandés considerado por Joyce como extraordinario. La primera vez que supe de él fue leyendo una pequeña reseña de Borges sobre su novela "At Swim-Two-Birds" donde el maestro se iba en elogios. Luego leí todas sus novelas y gran parte de la divertida columna diaria que mantenía en el Irish Times. Para mí escribió para mí, tanto me encanta.
A otro que debe encantarle, a pesar del mutis odioso, es a Woody Allen, quien lo plagia sin darle el beneficio de mencionarlo, verbigracia:
“La inmortalidad es más fácil de encontrar en Dublín que una habitación de precio razonable". Flann O’Brien
"No solamente Dios no existe, sino que trata de conseguir un plomero en el fin de semana". Woody Allen
Pero bueno, qué vidæsta. En el libro "Myles antes de Myles", el editor jura haber encontrado el primer escrito publicado de un alumno de la secundaria Blackrock College llamado Brian O’Nolan (Flann O’Brien). No se sabe la edad que tenía, era bien joven. Y nos dice que ya había evidencia de que el mozalbete que lo escribió había abierto quizás demasiados libros a una edad demasiado temprana. También se podría decir que ya sabía Latín, Griego, Gaélico, Alemán, Euskera, Swahili, Mandarín y Guaraní. Aprendidos por diccionarios. No había Google. Es un poema, cuyo título es el motto de su escuela:
AD ASTRA
Ah! When the skies at night
Are damascened with gold
Methinks the endless sight
Eternity unrolled.
A LAS ESTRELLAS
¡Ah! Cuando los cielos en noche
Son damasquinados con oro
Mipiensa la vista sinfín
Eternidad desenrolló.
El editor escribe que el poema es único en la escritura creativa de O’Brien en que no exhibe ninguna de su ironía característica. Yo estaba pensando en la elección de Damasquinado; en la multiplicidad, anunciadora de pseudónimos, de Cielos en lugar de Cielo; y ya se notaba ese gusto de aterrizar el lirismo con Mipiensa. Pero bueno, un jovencito escribiendo lo que sintió mirando el cielo pensando en la Eternidad.
Mi primer poema no fue publicado, una de las tantas injusticias de esta vida. Pero lo recuerdo íntegramente:
A LOS DAMNIFICADOS
Quiero esta noche dormir
Ver por siempre a Morfeo
Para no ver lo que pasa
En este mundo tan feo.
No hay que ser un genio para notar que la similitud es nostradamunesca (me quedé en damasquinado). Elaboro:
En ambos poemas se menciona la Noche. Un joven poeta está afuera, tal vez para un muchacho irlandés era más fácil estar en la calle en la noche, y además miraba a los cielos. El otro está adentro, tal vez para un muchacho dominicano era más difícil estar palomeando afuera, en un barrio llamado Los Damnificados sin pavimento ni aceras, especialmente si había un apagón, resaca o rumores de huelga, con gente pensado en quemar gomas, en tirar piedras, y las 8 mujeres de la familia voceando desesperadamente su nombre subiendo cada una una octava hasta llegar al falsetto.
En ambos también está lo infinito. El muchacho irlandés quiere ver la Eternidad, el muchacho dominicano quiere dormir por siempre. Es solo la ligera diferencia entre un genio en desarrollo y un pichón de vago.
En ambos encontramos la rima. Algunos podrían decir que la del dominicano está un poco desordena, simple, tosca. ¿Cómo pueden, Morfeo y Feo, competir con Gold y Unrolled? Un abuso del irlandés. Imagino que, además de la genialidad, será la educación. Ser adolescente y leer Cien Años De Soledad es tan grande como leer el Ulises, pero el programa educativo del Liceo Plan De Reforma en Bonao, que no tenía biblioteca, no creo que aguantaba un round con el del Blackrock College en Dublín. Y eso, que creo que en esa época se asignaba al Ministerio de Educación un chin chin chin más del Producto Interno Brutísimo que el asignado ahora.
Otra cosa asombra y puede provocar sed. El irlandés usó una metáfora que, refiriéndose a una abstracción, sin embargo, puede ser apoyada por los sentidos, como quería el profesor de Coleridge (misticismo a cotidianidad). La Eternidad sí, pero vista con los ojos en los cielos damasquinados. Que eso de damasquinado es un hallazgo. Le ahorro el Google. "Hacer labores de ataujía". Espere un momento. Perdón, estaba bebiendo agua. Sí, ataujía (como todomundo sabe) no es más que un adorno hecho con filamentos de oro o plata, y también es una labor primorosa o de difícil combinación o engarce.
Por último, los títulos. AD ASTRA. A LOS DAMNIFICADOS. Uno vivía en Dublín, que no debía ser un paraíso en la tierra tampoco, tal vez por eso miraba las estrellas. El otro vivía en Bonao, en lugar de mirar hacia la calle, prefería dormir para no ver las peculiaridades exóticas de un barrio surgido ante la emergencia atrasada por años de ubicar muchas familias cuyas viviendas habían sido afectadas inexorablemente por algún ciclón. En fin, amable lector, que mi primer poema es una especie de parte atrás del primer poema de Flann O’Brien.