Miami, Estados Unidos (EFE).- El Gobierno de EE.UU. dejó claro que está dispuesto a aplicar toda la presión necesaria para que los gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua "caigan" y alentó a otros países a contribuir a que cubanos, venezolanos y nicaragüenses se libren de la "opresión".
Bolton criticó que el presidente Barack Obama se acercara al gobierno de Cuba, que restableciera las relaciones diplomáticas, y que se fotografiara con la imagen de Ernesto -Che- Guevara de fondo, durante su visita a La Habana.
"No es tiempo de retroceder sino de incrementar la presión", dijo el asesor presidencial estadounidense John Bolton en Miami, después de haber pronunciado un discurso sobre la política estadounidense hacia América Latina, que se centró casi exclusivamente en lo que bautizó como "la troika de la tiranía" latinoamericana.
Bolton anunció en su discurso nuevas medidas concretas contra Cuba y Venezuela, pero respecto a Nicaragua solo señaló que si no hay elecciones libres y anticipadas y se restablece la democracia, el Gobierno de Daniel Ortega va a sentir "todo el peso" de las sanciones estadounidenses.
En el caso de Cuba, anunció que más de una docena de entidades de propiedad o controladas por militares, fuerzas de seguridad o la inteligencia van a sumarse a una lista de entidades con las que los estadounidenses no pueden hacer negocios.
Sobre Venezuela, anunció que el presidente Donald Trump firmó un decreto que impone "nuevas y duras sanciones" a ese país, esta vez destinadas a impedir que ciudadanos estadounidenses se involucren con quienes hacen "transacciones fraudulentas y corruptas" con oro venezolano.
En el caso de Cuba indicó que el presidente Donald Trump está decidido a cumplir con los compromisos que adquirió con la comunidad cubano-estadounidense en 2017 para revertir la política "equivocada" de su antecesor en la Casa Blanca, Barack Obama, respecto a Cuba.
"Sólo nos vincularemos a un Gobierno cubano que esté dispuesto a acometer reformas necesarias y tangibles, un gobierno que respete los intereses del pueblo cubano", subrayó en el discurso.
También habló de los pedidos para que el expresidente cubano Raúl Castro sea enjuiciado en Estados Unidos y dijo que es competencia del Departamento de Justicia, pero emitió su opinión personal.
Bolton espera que algún día "el pueblo libre de Cuba" pueda llevar a Raúl Castro ante la justicia para que responda de "los crímenes cometidos durante décadas".
En una entrevista con Efe minutos antes del acto, el asesor indicó que en los próximos dos meses van a "revisar cuidadosamente" la ley que permite presentar demandas en EE.UU. por expropiaciones en Cuba por parte de ciudadanos estadounidenses.
"Sería recomendable analizar este problema con una mirada fresca y revisarlo seriamente", indicó sobre el Título III de la ley Helms-Burton, que desde 1996 constituye la columna vertebral del embargo al que Estados Unidos tiene sometido a Cuba desde los años sesenta.
Sobre Venezuela dijo que las nuevas medidas apuntan al sector del oro porque es "muy importante" para el Gobierno de Nicolás Maduro, pues es uno de los pocos de los que todavía puede "obtener divisas".
Además, dijo que el Gobierno de Trump está "muy preocupado" por el éxodo de venezolanos, un desastre humanitario con consecuencias para otros países del continente.
En respuesta a una pregunta sobré que haría EE.UU. si las sanciones al Gobierno de Maduro no tienen el efecto buscado, dijo que no avizora algo como una intervención.
Bolton aseveró que las medidas tomadas por EE.UU. han hecho que los regímenes de la "troika" sean ahora "más vulnerables" que nunca y destacó que "los pueblos (de los tres países) tiene impaciencia" por ver gobiernos elegidos democráticamente.
Aunque la mayor parte del discurso estuvo dedicada a "la troika de la tiranía", también habló de la voluntad de la Casa Blanca de estrechar relaciones con "gobiernos responsables" como "los de México, Colombia, Brasil, Argentina y otros muchos" para hacer "avanzar el estado de derecho y aumentar la seguridad y la prosperidad".
En este punto del discurso mencionó como "signos positivos" la llegada a la Presidencia de Jair Bolsonaro, en Brasil, e Iván Duque, en Colombia.
En la entrevista alentó a otros gobiernos americanos y a los socios europeos de Estados Unidos a sumarse a los esfuerzos para impedir que la "troika de la tiranía siga oprimiendo" a la gente.
Sin mencionar a nadie indicó que hay socios de EE.UU. que "no ven claramente" lo que le ocurre a los pueblos de Cuba, Venezuela y Nicaragua y siguen "beneficiando con turismo y comercio" a los "dictadores".
"Va a hacer falta mucha diplomacia", agregó sin dar detalles.
Para terminar afirmó que el presidente Trump vería como un "gran éxito" si "dentro de seis años" (lo que significaría su reelección en 2020) hay en el continente "tres países libres mas". EFE