Londres, 5 nov (EFE).- El Reino Unido "fue engañado" por Estados Unidos sobre el supuesto arsenal nuclear del régimen de Sadam Husein en Irak, lo que significa que "no estuvo justificada" la invasión del país árabe en 2003, concluye el ex primer ministro británico Gordon Brown en un nuevo libro adelantado hoy.
Brown, que era ministro de Economía laborista durante la guerra liderada por Washington y Londres, publica el próximo martes "Mi vida, nuestros tiempos", donde asegura que el Gobierno estadounidense les ocultó información "crucial".
El político escocés, que sucedió en 2007 a Tony Blair como primer ministro, hasta 2010, revela que la Administración estadounidense de George W. Bush manejaba un informe de Defensa "secreto" que nunca fue mostrado al Ejecutivo de Londres, y que supuestamente cuestionaba que Husein tuviera capacidad nuclear.
La eventual constatación de que el Gobierno iraquí de la época no tenía armas de destrucción masiva ni tampoco capacidad para atacar a los países occidentales lleva a Brown a concluir en su libro que "la guerra no estaba justificada como último recurso y la invasión no fue una respuesta proporcionada".
El exministro explica que supo del presunto informe secreto estadounidense después de salir del Gobierno y reflexiona que, si hubiera tenido acceso antes, el curso de la historia hubiera podido ser diferente.
"Sabemos ahora por documentos clasificados estadounidenses que en los primeros días de septiembre de 2002 un informe preparado por el director de inteligencia de los Jefes del Estado Mayor conjunto de EEUU se puso sobre la mesa del secretario de Defensa, Donald Rumsfeld", escribe Brown.
Ese informe había sido encargado por Rumsfeld para "identificar las lagunas en el análisis de inteligencia", explica, y añade que "ahora resulta claro que desafió rotundamente la visión oficial".
"Si estoy en lo correcto que en algún lugar del sistema estadounidense se sabía la verdad sobre la ausencia de armas en Irak, entonces nosotros no solo fuimos desinformados, sino también engañados en el crítico asunto de las armas de destrucción masiva", asevera.
La decisión de invadir Irak, apoyada por el Partido Conservador pero rechazada por muchos laboristas y millones de ciudadanos que se manifestaron en las calles, causó un grave daño político a Blair y también marcó la trayectoria de Brown.
Una investigación de siete años de duración del juez británico John Chilcot concluyó en 2016 que Husein, que fue ejecutado en 2006 por sus sucesores, no representaba "una amenaza inminente" y que la guerra se declaró sobre la base de "inteligencia defectuosa". EFE