BUENOS AIRES, Argentina.- El presidente argentino, Mauricio Macri, anunció este miércoles, antes de la apertura de los mercados, una serie de medidas económicas y se responsabilizó del resultado de las primarias del domingo pasado, que perdió ampliamente.
"Sobre el resultado de las elecciones sepan que les entendí. Que eso haya sucedido es pura y exclusivamente responsabilidad mía y de mi equipo de Gobierno", expresó el mandatario antes de anunciar las medidas que afectarán a "17 millones de trabajadores y a sus familias".
Macri admitió que en su gestión dio preferencia a reformar necesidades estructurales para tener una base sólida, pero que tras escuchar lo que los argentinos "quisieron decir el domingo" en las urnas, va "a hacer lo imposible para seguir acompañándolos más que nunca en este camino".
Las mejoras se aplicarán para los trabajadores formales e informales, estatales y privados, y también para aquellos en relación de independencia y cuentapropistas.
Entre las medidas, estableció el aumento del salario mínimo, que beneficiará a unos 2 millones de trabajadores.
Para definir el porcentaje final del aumento, el Gobierno va a convocar al Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil, del que participan el Estado, los trabajadores y las empresas.
Las medidas también apuntan a las Pymes: "Queremos ayudarlas porque reconocemos su valor y sabemos las deudas que están teniendo". Para eso, dijo que implementarán "un plan que les va a permitir pagar en 10 años las deudas impositivas".
Además, anunció un incremento del 40 % de la beca Progresar y un congelamiento en el precio de las naftas por 90 días.
Los trabajadores se verán beneficiados por un aumento del 20 % en el mínimo no imponible y en la deducción especial. Esta medida beneficia a 2 millones de personas e implica una mejora de unos 2.000 pesos mensuales.
Mientras que a los empleados de la administración pública, de las Fuerzas Armadas y de las fuerzas de seguridad les otorgarán un bono de 5.000 pesos por mes.
En su mensaje, Macri aseguró que entendió el "enojo" y "el cansancio" de los ciudadanos, pero les pidió "que no pongan en duda el trabajo que" hicieron "juntos" durante su mandato "porque es mucho y es mucho lo que pusimos en juego".
"En estas últimas 48 horas quedó claro que la incertidumbre política hace mucho daño y nos obliga a ser responsables", dijo al hacer referencia a las últimas dos turbulentas jornadas que sufrió el país con la devaluación de la moneda local y la subida del riesgo país.
Dichos efectos los achacó en sus anteriores intervenciones a que el partido que representa Alberto Fernández, Juntos por el Cambio, y que ganó ampliamente en las primarias del domingo pasado, no genera confianza en los mercados.
Asimismo, añadió que estará disponible "las 24 horas" para poder hablar con los candidatos presidenciales, con alguno de los cuales, señaló, ya habló.
Pero los mercados abrieron a la baja
El peso argentino abrió este miércoles a la baja por tercera jornada consecutiva pese a las medidas económicas que anunció el presidente Macri minutos antes de la apertura de los mercados.
La divisa local vuelve a devaluarse con respeto al dólar, que según el estatal Banco Nación cotizó en el inicio de la jornada a 61 pesos para la venta por unidad, 3 pesos por encima de los 58 en los que cerró el lunes su cotización.
El riesgo país sigue también con su escalada, aunque a un ritmo menor que en los dos últimos días, y alcanzó los 1.867 puntos básicos tras cerrar en 1.771 el día anterior.
A falta de la apertura de la bolsa, esta es la reacción de los mercados al paquete de medidas económicas que el Ejecutivo impulsó este miércoles para intentar paliar la situación económica de un país que, tras conocerse los resultados de las elecciones primarias del pasado domingo, encadena tres jornadas negativas para sus activos financieros. EFE