San Juan,  Puerto Rico. -El Arzobispado de San Juan suspendió de manera temporal al sacerdote José Antonio Santiago Santos, quien fue acusado de alegada violación sexual contra  un joven invidente y con limitaciones de desarrollo, feligrés de su parroquia y cuya edad mental es de unos 15 años.

Ante el nuevo escándalo sexual que sacude a la comunidad católica en Puerto Rico, el Arzobispado tras conocer la informacion sobre el apresamiento del sacerdote de la Parroquia Espíritu Santo en Bella Vista, señaló en un comunicado que "el cura no podrá ejercer ninguna actividad sacerdotal mientras dure la investigación", añadiendo que "la determinación es de manera temporal. "

El sacerdote José Antonio Santiago Santos fue presentado este lunes ante la Corte donde le fue conferida una fianza de US$50,000 impuesta por el juez José Banuchi del Tribunal civil que conoce el caso sobre la alegada violación en contra de un miembro de la citada iglesia católica.

"Cuando culmine el proceso civil y canónico en este sentido, será determinado si la suspensión es de manera temporal o definitiva", indica el Arzobispado de San Juan.

Según medios, el Padre Chelo, como cariñosamente le conocía el menor víctima de supuesta agresión sexual, habría admitido ante la Corte que "tuvo relaciones sexuales con el joven,  pero de mutuo consentimiento."

El joven presunta víctima de la atroz acción "tiene 31 años de edad cronológica pero mentalmente apenas 15 años y es invidente", por lo que las autoridades judiciales decidieron tratar el caso en el ámbito de acciones contra menores de edad.

Las autoridades policiales de Bayamón, habían apresado al cura luego de la denuncia presentada por un hermano de la supuesta víctima, en la que "él joven contó a su hermano lo sucedido."

Mientras que se realiza una "exhaustiva investigación al respecto", este lunes la comunidad católica en Bella Vista en Bayamón, reaccionó "muy sorprendida" ante las acusaciones en contra del sacerdote.

"Es posible que éstos hechos ocurrieran el pasado viernes", habría indicado la Policía de Bayamón.

El Arzobispado de San Juan, exhortó a los feligreses a "orar" para que la verdad salga a la luz pública y la Justicia cumpla con sus legítimos propósitos" en torno al abominable acto.

Según medios, el Padre Chelo, como cariñosamente le conocía el menor víctima de supuesta agresión sexual, habría admitido ante la Corte que "tuvo relaciones sexuales con el joven,  pero de mutuo consentimiento."

La División de Delitos Sexuales del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Bayamón, conocido por sus siglas como CIC, es el organismo que tiene bajo sus hombros la investigación que se sigue en este caso de manera conjunta con las autoridades judiciales de Puerto Rico.