REDACCIÓN INTERNACIONAL.-Los republicanos critican abrumadoramente el desempeño del presidente Donald Trump en la conferencia de prensa conjunta el lunes con su homólogo ruso, Vladimir Putin, en Helsinki, Finlandia, donde Trump calificó a Rusia como un "buen competidor" y se negó a condenar al Kremlin por entrometerse en las elecciones estadounidenses.
"Fue una de las actuaciones más vergonzosas de un presidente estadounidense que se recuerde", dijo el senador John McCain (R-Ariz.) quien calificó la cumbre de Helsinki como un "error trágico". Algunas de las críticas más mordaces vinieron de una multitud familiar pero pequeña de republicanos: críticos frecuentes de Trump y legisladores republicanos retirados.
Aun así, "una angustia notable fluyó en gran parte del Partido Republicano el lunes por la tarde", informaron Elana Schor y Burgess Everett, de POLITICO, aunque "pocos legisladores republicanos señalaron planes concretos para actuar ante su alarma por la notablemente acogedora presentación de Trump con el presidente ruso".
El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan (R-Wis.), dijo que Rusia sin duda "interfirió en nuestras elecciones y continúa con los intentos de socavar la democracia aquí y en todo el mundo".
El líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), dijo a los periodistas: "Los rusos no son nuestros amigos, y estoy totalmente de acuerdo con la evaluación de nuestra comunidad de inteligencia".
Sin embargo, no todos los republicanos han hecho críticas al Presidente. "Los republicanos que están criticando son los republicanos a favor de la guerra como McCain y [Lindsey] Graham o los anti-Trump como [Ben] Sasse", dijo el senador Rand Paul (republicano por Kentucky), que planea visitar Rusia el mes próximo.
"Están motivados por su aversión persistente y constante hacia el Presidente", dijo.
La posición de apoyo de Paul sobre el compromiso del presidente con Rusia es compartida por un pequeño grupo de legisladores republicanos que viajaron a ese país durante el receso de vacaciones del 4 de julio. "[T] a pesar de que ciertamente no citan a Rusia como amigo, creen que el compromiso de Trump con Putin es la decisión correcta", escribieron los periodistas.
Los líderes demócratas cuestionaron si Trump se alineó con Putin por encima de su propia comunidad de inteligencia porque el líder ruso tiene algo sucio sobre él, una pregunta que se hizo en la conferencia de prensa y en una entrevista posterior de Fox News. Putin descartó la idea como "rumores".
No obstante, la líder de la minoría de la Cámara, Nancy Pelosi (D-Calif.), dijo que la actuación de Trump "demuestra que los rusos tienen algo con el presidente, personal, financiera o políticamente".
El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, agregó: "Millones de estadounidenses continuarán preguntándose si la única explicación posible para este comportamiento peligroso es la posibilidad de que el presidente Putin tenga información perjudicial sobre el presidente Trump".
Schumer, según reportan, enumeró cuatro formas en que los republicanos podrían respaldar sus críticas retóricas a Trump: fortalecer las sanciones rusas que el Congreso aprobó el año pasado, buscar testimonios de los asesores de Trump que viajaron con Trump a la reunión, detener cualquier intento de socavar la investigación del abogado especial Robert Mueller; y presionar a Trump para que solicite la extradición de 12 ciudadanos rusos a los que Mueller inculpó el viernes por interferencia electoral".
El líder de la mayoría en el Senado, John Cornyn (R-Texas), dijo que el Senado ya había hecho gran parte de lo que Schumer había pedido, pero llamó a la extradición de los acusados rusos como simples "ilusiones", porque "Putin no lo va a hacer".
Alarma en Europa
Los legisladores europeos quedaron atónitos ante la conferencia de prensa de Trump-Putin, que según dijeron, envió un mensaje a otros sistemas políticos democráticos dirigidos de forma similar a la interferencia de Moscú, que no pueden contar con que Estados Unidos los respalde.
Un miembro del Parlamento británico, Damian Collins, del partido conservador, dijo que el presidente Trump está enviando a otros países amenazados por Moscú un mensaje que dice “Estás solo”.
Durante la conferencia de prensa de Trump con Putin en Helsinki, Trump se negó a confrontar a Putin sobre la intromisión de Rusia en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 o incluso a admitir directamente que ocurrió, a pesar de los reiterados hallazgos de los funcionarios de inteligencia de su propia administración.
Trump también dijo a los periodistas que "ambos países" eran responsables del mal estado de sus relaciones. "Creo que todos hemos sido tontos. Creo que todos tenemos la culpa ", dijo Trump, con Putin de pie a su lado.
Ojārs Kalniņš, un diplomático y exembajador de Letonia en EE.UU., que habló en el evento del Consejo Atlántico, criticó las declaraciones de Trump como "ridículas".
Refiriéndose a las agresivas acciones rusas que atraen las denuncias de Occidente, Kalniņš dijo al HuffPost: "Si estás hablando de (…) la anexión de Crimea y la invasión del este de Ucrania, EE. UU. y Europa no tienen la culpa de eso, en absoluto. Esa fue una acción unilateral de Rusia”. ".
Los países europeos han luchado durante mucho tiempo contra la interferencia rusa en sus asuntos internos. A principios de este año, los demócratas en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado emitieron un informe que detalla la interferencia rusa en 19 países, incluido el apoyo a un partido de extrema derecha en las últimas elecciones presidenciales francesas y una campaña de desinformación durante las elecciones parlamentarias alemanas.
Hannah Hopko, una legisladora de Ucrania, dijo que después de la cumbre Trump-Putin, era necesario que Estados Unidos estableciera una "posición firme" de que el reconocimiento de la anexión de Crimea por Rusia no está sobre la mesa.
"Sin concesiones", dijo Hopko en el evento del Consejo Atlántico.
La reunión de Trump con Putin siguió a los comentarios combativos que el presidente estadounidense hizo prácticamente unas pocas horas antes, en una tumultuosa cumbre de la OTAN en Bruselas y en las protestas masivas contra el presidente en el Reino Unido durante el fin de semana. Él ha estado intensificando sus críticas a los aliados estadounidenses tradicionales, hasta llegar tan lejos en una entrevista de CBS News en que categorizó a la Unión Europea como un "enemigo".
"Es un momento muy difícil para Europa ahora”, dijo Kalniņš. "Todo esto está en las manos de Putin, que quiere debilitar a Europa porque la forma en que puede hacer que Rusia sea grande es debilitando a los demás".