Washington, Estados Unidos (EFE/Lucía Leal).- Pese a que sus diferencias en varios temas siguen siendo pronunciadas, EE.UU. y Cuba acordaron este viernes avanzar todo lo posible en su cooperación bilateral antes de 2017, con el fin de hacer "irreversible" su acercamiento antes de que el presidente estadounidense, Barack Obama, abandone el poder en enero.
Delegaciones de los dos países celebraron en la sede del Departamento de Estado estadounidense la cuarta reunión de la Comisión Bilateral, un mecanismo que crearon en 2015 para avanzar en la normalización de sus relaciones diplomáticas.
Cuba volvió a poner sobre la mesa su reclamo del levantamiento del embargo y la devolución de la base naval de Guantánamo, pero la reunión se desarrolló en un ambiente "productivo" y "constructivo", según informó la parte estadounidense al concluir el encuentro.
"Las delegaciones hablaron de su deseo mutuo de lograr todos los avances que sean posibles antes de que acabe el año", indicó el Departamento de Estado en un comunicado.
La candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, ha prometido seguir con el acercamiento a la isla iniciado por Obama y se ha mostrado a favor de que el Congreso levante el embargo, pero la postura de su rival republicano, Donald Trump, es menos clara.
A 38 días de las elecciones presidenciales en EE.UU., ambos gobiernos están interesados en consolidar todo lo posible el proceso de normalización iniciado en 2014 por los presidentes Barack Obama y Raúl Castro.
"Nuestra voluntad y nuestra aspiración es que el proceso iniciado el 17 de diciembre de 2014 sea irreversible", dijo después del encuentro la directora general para EE.UU. del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Josefina Vidal, quien presidió la delegación cubana.
"En el mes de diciembre tendremos la quinta y última reunión de la comisión bilateral correspondiente al Gobierno del presidente Obama, pero Cuba ha trasladado su interés y disposición a continuar este mecanismo en el futuro. Veremos qué pasa más adelante", apuntó Vidal en una sesión de preguntas y respuestas a través de Twitter.
La candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, ha prometido seguir con el acercamiento a la isla iniciado por Obama y se ha mostrado a favor de que el Congreso levante el embargo, pero la postura de su rival republicano, Donald Trump, es menos clara.
Durante las primarias republicanas, Trump fue el único aspirante de su partido que se mostró a favor de un acercamiento a Cuba, pero dijo que probablemente cerraría la embajada estadounidense en La Habana hasta lograr un acuerdo con el Gobierno cubano que él considerara "más fuerte" y apropiado como base de las relaciones.
Cuba cree que antes de que finalice su mandato, Obama tiene la oportunidad de usar su poder ejecutivo para eliminar escollos que lastran la normalización en el ámbito económico.
"El presidente Obama pudiera autorizar exportaciones de más productos de EE.UU. a Cuba, permitir las importaciones de productos cubanos, autorizar las inversiones de EE.UU. en Cuba y normalizar las relaciones bancarias", sugirió hoy Vidal.
En la reunión celebrada hoy, EE.UU. y Cuba decidieron "coordinar siete visitas de alto nivel para las próximas cinco semanas" en ambos sentidos, sobre temas como "la salud, el medio ambiente, la educación, y las relaciones bilaterales como tal", según Vidal.
Además, Estados Unidos y Cuba están negociando seis acuerdos más que esperan poder cerrar "entre octubre y diciembre de 2016″, apuntó la funcionaria cubana.
Los nuevos acuerdos versarán sobre "aplicación y cumplimiento de la ley, cooperación en monitoreo sísmico, intercambio de información meteorológica, áreas marinas protegidas, búsqueda y salvamento y respuesta a derrames de hidrocarburos en el Golfo de México y el estrecho de Florida".
También hay planeados "encuentros técnicos sobre ciberdelitos y lavado de activos, entre Tropas Guardafronteras de Cuba y el Servicio de Guardacostas de EE.UU.", y diálogos "sobre desarme y no proliferación, y derechos humanos", según apuntó la Cancillería de Cuba en un comunicado tras la reunión.
Además de reivindicar el fin del embargo comercial y la devolución de Guantánamo, Cuba protestó por el programa educativo "World Learning", lanzado por la Embajada estadounidense y que el Gobierno de Castro considera "injerencista".
Cuba volvió a pedir además la eliminación de la Ley de Ajuste Cubano y la política de "pies secos/pies mojados", que privilegian a los cubanos que tocan territorio estadounidense, quienes pueden pedir la residencia permanente un año después, mientras que los interceptados en el mar son devueltos a la isla.
Entre los temas que se abordaron hoy estuvieron "la agricultura, la salud, la protección medioambiental, la relación económica, la ciencia y la tecnología, la aviación civil, los asuntos regulatorios y los reclamos" mutuos de compensaciones económicas, entre otros, de acuerdo con el Departamento de Estado. EFE