México-. Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud mexicano, explicó este jueves que la distribución de la vacuna Pfizer contra el COVID-19 se dificultará debido a que ningún país del mundo cuenta con una red de ultracongelación.

"México no tiene una red de ultracongelación, como lo tiene ningún país del mundo. Estados Unidos, que es el país donde existe esta compañía, Pfizer, en la que se desarrolló la vacuna, o Alemania, donde hay también una compañía asociada en producir esta vacuna, tampoco tienen una red de ultracongelación", comentó en conferencia de prensa.

"¿Qué es una red de ultracongelación? La vacuna de la que estamos hablando es la vacuna de Pfizer contra el COVID. Tiene una tecnología muy diferente a la que tiene cualquier otra vacuna del mundo, no solamente vacuna contra el COVID, sino contra cualquier otra enfermedad, y requiere que el producto, la vacuna, un frasquito en la que se encuentra almacenada, esté congelada a 70 grados centígrados por debajo de cero, y tiene que estar durante todo su procesamiento, y solamente durante los últimos cinco días antes de ser usada se puede descongelar, es decir, a partir de que se descongela solo restan cinco días máximo para que se utilice", explicó.

Dijo que si se tratara de una sola dosis o de unas cuantas quizá esto no sería un reto, "porque en cinco días hay tiempo suficiente para distribuirlas y usarlas, pero cuando hablamos de millones de dosis y estamos pensando además que es indispensable que haya equidad en la distribución, entonces tenemos que considerar el país en su conjunto, el territorio nacional en su conjunto donde debería de haber la capacidad de llevar esta vacuna".

"Este es un reto muy grande, la Organización Mundial de la Salud ya lo ha expresado, todos los países, si es que quieren utilizar esta vacuna, deberían considerar que no pueden adquirirla a menos que haya una red no de refrigeración, sino de ultracongelación", agregó.

Indicó que Pfizer está considerando unas cajas de ultracongelación que pudieran permitir acercar la vacuna a distintas poblaciones. "Pero aun así cuando hablamos de ultracongeladores, no estamos hablando de un refri del tamaño de lo que uno tiene en la casa, y tampoco de la intensidad de refrigeración de lo que uno tiene en la casa".

"Un refrigerador de casa generalmente está entre dos y ocho grados centígrados, que es la temperatura fría suficiente para conservar la mayoría de las más vacunas, incluso nuestro congelador doméstico generalmente está a una temperatura entre menos cuatro y hasta menos 15 grados centígrados, pero aquí estamos hablando de menos 70, estamos hablando de dispositivos de tamaño industrial que requieren una tecnología muy demandante en energía eléctrica, en personal y en el manejo de la misma", detalló.

El subsecretario de Salud preciso que ante este desafío lo que está haciendo México es considerar los beneficios potenciales de tener esta vacuna, comparada con otras posibles vacunas, "respecto a la inversión y no solamente en términos de dinero, sino en términos de tiempo y en términos de personal que se necesitaría para tener la capacidad de utilizar esta vacuna en un tiempo razonable".

"Y eso es lo que está en este momento en revisión, estamos en conversaciones precisamente Pfizer. Lo que se firmó hace unas pocas semanas aquí mismo en la conferencia matutina fue una carta de intención respecto a la adquisición de estas vacunas, que nos ha dado la ventaja de tener la posibilidad de un acceso oportuno, pero no se han firmado los contratos".

Añadió que una de las consideraciones "importantísimas" para firmar o no estos contratos depende de que sea realista la posibilidad de garantizar este sistema de ultracongelación que permita llevar en tiempo, forma y con las condiciones adecuadas la vacuna.