SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Asociación Dominicana de Productores de Ron (ADOPRON) condenó la producción y comercialización de bebidas alcohólicas adulteradas, que en los últimos doce meses le ha costado la vida a más de 300 personas, y a la vez exigió mayores control en la importación y uso del metanol, que es la razón de intoxicación de los consumidores de estas bebidas ilícitas.
"Además de los decomisos, cierre de fábricas ilegales, lugares de expendio y el sometimiento a la justicia de los responsables de estas malas prácticas, es necesario aplicar estrictos mecanismos de control en la importación y uso del metanol, alcohol etílico desnaturalizado con metanol y los demás alcoholes utilizados como materia prima", dijo el gremio en un comunicado.
ADOPRON recordó que, de acuerdo con declaraciones del Ministerio de Salud Pública, las pruebas de laboratorio de los intoxicados confirmaron que las bebidas adulteradas consumidas contenían una concentración de metanol de más del 50 %.
"Concentraciones por encima de ese nivel (50% de metanol) no se producen en el país ni se generan en procesos de fabricación clandestina o industrial de bebidas alcohólicas, por lo que se deduce que su origen son el contrabando o las importaciones de metanol o alcohol etílico desnaturalizado con metanol, que luego se desvían para la fabricación de productos que resultan letales", explica el gremio.
El metanol es un alcohol no apto para consumo humano que solo se utiliza en la industria para disolventes, desinfectantes, barnices y pinturas, entre otros productos. La fabricación de bebidas con este componente es un acto criminal que debe ser castigado con todo el peso de la ley, insiste la organización empresarial formada por industrias del ron
ADOPRON también respalda el proyecto de Tráfico de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) para que los consumidores puedan comprobar, a través de un sello colocado en cada botella y de la App REVÍSAME, si los productos son auténticos o falsificados.
En el comunicado, el gremio expresa que además de las vida que ha costado, las bebidas alcohólicas ilícitas "han afectado más de una vez la reputación internacional de República Dominicana y de dos marcas país fundamentales para nuestra economía: el turismo y el ron".
"Apoyamos al Estado y a todas las instituciones y organismos que enfrentan esta irresponsable y criminal práctica. Como país, necesitamos erradicar la ilegalidad en el mercado de bebidas alcohólicas y garantizar que los establecimientos expendan productos que cumplan con las normas y leyes vigentes", indica el comunicado.