No lo dicen uno ni 10 ni 20. Son más de 40 estudios científicos realizados en pacientes los que han concluido que la vitamina D ayuda a mitigar los efectos del coronavirus (COVID-19).
La deficiencia de vitamina D explica en parte las diferencias que hay entre distintos grupos de población en cuanto a la susceptibilidad, gravedad y mortalidad del coronavirus, de acuerdo con el estudio publicado en el Journal of the American College of Nutrition. La investigación sostiene que esta deficiencia posiblemente explica la mayor tasa de mortalidad entre personas diabéticas, hipertensas y adultos mayores.
Esta vitamina media el metabolismo óseo, la autorregulación del calcio y las funciones inmunitarias, mientras que su deficiencia -sostiene el estudio- se asocia con reacciones inflamatorias y disfunción inmunitaria, lo que predispone a las personas a infecciones graves.
"La vitamina D produce efectos antivirales por mecanismos tanto directos como indirectos", señala el artículo titulado La vitamina D en la prevención y el tratamiento de COVID-19: perspectiva actual y perspectivas futuras.
De acuerdo con otro artículo publicado en la revista científica británica The BMJ, esta sustancia ayuda a reducir la infección, la gravedad así como la mortalidad a causa de este patógeno.
"Los estudios sugieren que los efectos de la vitamina D probablemente sean grandes: 50 por ciento menos de infectividad", señala el artículo publicado en octubre de este año.
Asimismo, el texto señala que tanto los adultos mayores como las personas con obesidad -población en alto riesgo de contraer el virus- por lo que general presentan deficiencia de esta sustancia, por lo que tienen un mayor riesgo de contraer COVID-19.