SANTO DOMINGO, República Dominicana-. Los efectos de la covid-19 han puesto de cabeza la economía de miles de familias dominicanas, mermando los comercios y sectores productivos importantes para el desarrollo nacional, dejando como una de las tantas consecuencias a más de 631 mil personas en la pobreza, solo en los tres meses más críticos de la pandemia.
Los exactamente 631 mil 972 personas que se sumaron a la lista de la pobreza monetaria, representan el 22 % del total de los “pobres adicionales” en el segundo trimestre del 2020, es decir de abril a junio, donde se perdieron la mayoría de los empleos por el cierre de los negocios como medida preventiva ante los contagios.
Son 2 millones 863 mil 510 el número de personas que a junio estaban en la pobreza, o sea, que de enero a marzo el total era de 2 millones 231 mil 510, para un aumento de un 22 %.
Desde junio hasta diciembre aún no se conocen cuantas personas se agregaron a este listado producto de la crisis, y será hasta final de febrero o principios de marzo que se brindará un informe de acuerdo con la directora de Análisis de Pobreza, Desigualdad y Cultura Democrática del Ministerio de Economía, Rosa Cañete Alonso.
Explica que si los programas de mitigación frente al covid-19 Quédate en Casa, FASE I y II y Pa’ Ti, no se hubiesen implementado, el número de personas en situación de pobreza general hubiese sido de 1,384,367, para el mismo segundo trimestre del año 2020. "Es decir, que los programas de mitigación puestos en marcha evitaron que un total de 752,395 personas cayeran en situación de pobreza".
Personas en situación de pobreza | ||
Trimestre 2020 | Con programas | Escenario hipotético sin programas |
Ene-Mar | 2,231,510 | 2,231,510 |
Abr-Jun | 2,863,482 | 3,615,877 |
Nuevos pobres | 631,972 | 1,384,367 |
Fuente: UAAES/MEPYD
Si se hace una comparación con años anteriores, a junio del pasado año son más las personas en pobreza que lo que se estimó al cerrar el 2019, con un total de 2 millones 171 mil 964 , en otras palabras, 691 mil 518 dominicanos menos en esa situación.
Empleos perdidos
En las recientes declaraciones del presidente de la República, Luis Abinader, se dio a conocer que, al 31 de diciembre de 2020, el total de personas desempleadas producto de la pandemia eran unos 65 mil, sin embargo, de acuerdo a las cifras de la Tesorería de la Seguridad Social (TSS), los trabajadores activos en el sector privado hasta fin del año pasado eran un millón 407 mil 758, en comparación con el 2019 para la misma fecha, cuando el número de cotizantes era de un millón 575 mil 014.
De acuerdo con estas cifras, al comprar los meses de diciembre de 2019 y 2020, año en que entró el virus al país, hablamos de unos 167 mil 256 trabajadores menos, aunque los meses de abril y mayo fueron los más duros en termino de pérdida de empleo.
En marzo cuando se reportó el primer caso de coronavirus en el país, en el TSS figuraban un millón 587 mil 920 trabajadores en el sector privado, bajando en abril a un millón 123 mil 288 y en mayo, el más crítico, a un millón 057 mil 891 empleados, es decir un poco más de medio millón de personas sin empleo (530,023).
Incertidumbre económica
Si bien los sectores económicos no se han recuperado del todo, los pronósticos del Banco Central sostienen un crecimiento en la economía de por lo menos un 6.0 %, afianzado en que, gracias a los programas sociales del Gobierno, ha habido una recuperación gradual desde su momento más crítico.
De todos los sectores de la economía los del proceso más lento en recuperarse es el turismo, así como los bares y restaurantes, y por último educación. Mientras que los que avanzan son el sector industrial y la agricultura.
De acuerdo con el economista Antonio Ciriaco Cruz, la economía dominicana está en “situación de incertidumbre” por los efectos que aún se mantienen por el covid-19.
Explica que la volatilidad en los precios del petróleo, el retraso de importaciones provenientes de China, incremento en el coste de los fletes, el alza en los alimentos, son reflejo de las repercusiones que ha tenido la pandemia y que crea esa incertidumbre.
“La reactivación ha venido poco a poco, de manera lenta, no a la velocidad que se requiere; esto por la incertidumbre que se mantiene en la economía mundial”, expresa.
Consideró el gobierno no tiene recursos porque ha habido un desplome en los ingresos y recaudaciones del Estado, lo que debilita la capacidad para hacer inversión pública.
“Hay que tomar en consideración que la inversión pública debería poder pasar el 6.0 %, sin embargo, no llega 2.5 % del PIB y aquí se está gastando más en intereses de la deuda pública, que representa 3.6 % del PIB, que en inversión pública y hasta que no exista una reactivación efectiva de la inversión publica aquí no puede haber una recuperación económica. Creo que todavía se requiere superar situaciones de incertidumbre”, puntualiza
Otro economista que cree que este año no se puede hablar de recuperación de la economía es Miguel Collado di Franco, quien considera que es probable que en el 2022 sea que se comience a ver esos cambios o se pueda estar comparativo al 2019, antes de la pandemia.
Sostiene que el impacto a la economía se ha reflejado, como en muchas otras áreas, en la pérdida de empleo, donde aún hoy muchos dependen de los programas Fase 1 y 2.
“El último dato que tenemos de personas que no están cotizando en fondo de pensiones es de más de 211 mil personas, que son números significativos en términos de empleos”.
Otro impacto de la covid-19 es el aumento en los precios de bienes y servicios, por lo que, en sentido general, sostiene que se necesita tiempo y además de medidas que garanticen o promuevan una recuperación en termino de reducción de costos, pagos de impuestos y otros factores que agravan las actividades económicas y que impulsan a la informalidad.
Esfuerzos del Gobierno
Para la reactivación económica el Gobierno ha implementado diversos programas, siendo el primero anunciado en septiembre pasado llamado Plan de Recuperación Responsable del Turismo con una inversión de más de RD$ 420 millones de pesos.
Otro esfuerzo de recuperación ha sido la extensión del programa de asistencia Quédate en Casa, hasta abril de este año con un costo de RD$ 15 mil millones, además de destinar unos RD$ 2 mil millones para el programa Fase y la creación de Supérate, una transformación de Comer es Primero.
Los dos últimos proyectos anunciados han sido el plan Canasta Segura, que pretende que el alza que experimenten los productos en el mercado internacional afecte lo menos posible a las familias dominicanas y el Plan de Reactivación de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes), para el cual se destinará 4,100 millones de pesos en préstamos, así como la extensión de la exoneración de anticipos del Impuesto Sobre la Renta.