La basura, la pesca indiscriminada y el calentamiento global pasan factura. Los ecosistemas marinos están "altamente fragmentados y alterados, producto del uso indiscriminado de recursos" advierte el viceministro de Recursos Costeros y Marinos de Medio Ambiente, José Ramón Reyes, luego de dar un balance de todo lo marino que se encuentra en el país.

Algunos detalles de la degradación apuntan al uso de mecanismos rudimentarios y altamente dañinos empleados por pescadores, como echar cloro al agua para que los peces se aturdan, o el uso de compresores y arpones que matan los corales. También los efectos del calentamiento global.

Una iniciativa privada que viene del sector turístico, pretende buscar soluciones para mejorar la salud costera, con proyectos de conservación de mangles y corales. El Grupo Iberostar y la Sociedad Alemana de Cooperación Internacional (GIZ), saldaron el pasado martes un proyecto público-privada con el Ministerio de Ambiente, para buscar soluciones a los ecosistemas marino-costeros en República Dominicana.

La alianza busca convertirse en punto de partida para desarrollar un modelo nacional de turismo que incluya la regeneración de ecosistemas amigables con la biodiversidad. "Parte de esto es poder compartirlo a nivel nacional e internacional, presentar al mundo lo que se puede hacer", enfatizó la directora global de Estrategia de Salud Costera de Iberostar, Erika Harms.

Una zona de restauración de manglares, ubicado en el complejo turístico de Iberostar, Punta Cana.

Es un proyecto con extensión de tres años y valorado por 1.3 millones de euros, que abarca, esencialmente impulsar el programa de cría de arrecifes de coral y continuar la conservación de manglares.

Esta alianza viene a fortalecer la restauración de manglares que ya desarrolla Iberostar con tres de las especies que se encuentran en el país (botón, rojo y blanco) con su extensión. "Lo que vemos es que cada propiedad de Iberostar en el país tenga su propio vivero de mangles y plan de restauración", explica Victor Galvan, gerente de salud costera para República Dominicana, Jamaica y Aruba.

Iberostar también ha levantado en su complejo de Punta Cana un laboratorio de corales que, básicamente, busca identificar cuales arrecifes de coral son más resistentes al blanqueamiento, para cultivarlos y que funcionen como opción de restauración en el futuro.

Una muestra de los corales estudiados en el laboratorio de Iberostar.

"Iberostar está muy alineada con la conservación de los océanos y entendemos que la salud costera es esencial para la experiencia de los viajeros  y la subsistencia del turismo a largo plazo", resume Harms la visión de la cadena hotelera, que tiene en el país siete hoteles, cinco de ellos ubicado en un gran complejo de Punta Cana.

Y como ejemplo sobre los beneficios que ofrece al turismo los ecosistemas sanos, explica que los corales saludables brindan protección contra huracanes, reduce oleajes, abundan los peces para la alimentación y constituyen un atractivo para el turismo de buceo.

Esta alianza forma parte del movimiento de Iberostar "Wave of change" para protección de los océanos y turismo responsable, que abarca tres áreas de acción: la economía circular, el consumo responsable de pescado y mejorar la salud costera y que está alineada a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Imagen del acto de alianza publico-privada, celebrada en el complejo Iberostar, Punta Cana.