En diciembre, las calles dominicanas se visten de un brillo peculiar protagonizado por luminarias de colores y la tradicional “brisita navideña”. Este espíritu de fraternidad se contagia a todos los lugares, desde establecimientos comerciales y empresas, hasta las instituciones públicas.
Los medios de comunicación cada año exponen las cifras de los desembolsos que realizan los organismos estatales en esta temporada, pero ¿cuánto realmente gasta el Gobierno en Navidad?
Entre 2014 y 2020, el Poder Ejecutivo destinó un total de RD $2,254,651,188.58 en "servicios de organización de eventos, festividades y actividades de entretenimiento" durante el mes de diciembre, según datos del Sistema de Información de la Gestión Financiera (Sigef).
Este gasto se dividió en cuatro categorías: eventos generales con una partida de RD $1,378,402,784.10, festividades con la suma RD $722,698,614.04, actividades deportivas con un monto de RD $10,165,784.61 y actuaciones artísticas con un total de RD $49,427,960.53.
De acuerdo a la Dirección General de Presupuesto (Digepres) esta inversión no se corresponde exclusivamente con gastos en eventos y festividades navideñas, también contempla asignaciones por concepto de: “servicios de ceremonial, servicios protocolares, gastos derivados de la celebración de festividades nacionales, aniversarios e inauguraciones, fiestas populares de recreación y entretenimiento, actividades culturales, deportivas, de asistencia social, fomento y de participación social”.
En promedio, el gasto en diciembre asciende a los RD $322,093,026.94 cada año. En ese sentido, la Navidad más costosa para el Estado dominicano, del período analizado, fue la de 2018 que representó un egreso de RD $596,715,212.06, es decir 274,622,185.12 por encima de la media.
Un ejemplo de gastos en ese 2018 fue una fiesta navideña celebrada por el Ministerio de Hacienda, que costó RD $5,986,423.20. En ese orden, las compras y contrataciones del Ministerio de Salud Pública, en ese año, fueron de RD $58,381,206.72. El Ministerio de Educación fue otro de los órganos que se sumaron en 2018 esta lista con una adquisición de bonos navideños de RD $30,000,000.00 y la compra de alimentos en un aguinaldo por RD $988,250.00.
El presidente de la Asociación Nacional de Economistas Dominicanos (ANED), Hernan Rodríguez, explica que esta situación puede afectar a los ciudadanos cuando se tratan de manera desigual las reparticiones u obsequios que dan algunas instituciones.
“Puede afectar al ciudadano común, en que la calidad en los beneficios sociales se reduce y eso incide en la calidad de vida del dominicano”, destaca Rodríguez.
El exgobernador del Banco Central, José Lois Malkún, afirma que este tipo de situaciones eran comunes en un gobierno como el anterior, que se ha visto involucrado en tantos escándalos. “Ese tipo de cosas era típica de un gobierno que sabemos cómo gastaba el dinero. Estamos viendo cómo se están develando la forma en la que se usaban los fondos en el gobierno pasado”, señala el experto.
Los economistas coincidieron en que este gasto, aunque podría ser una cifra considerable, está previsto en las cuentas comunes de estos organismos y no representa un objeto cuestionable. En palabras de Rodríguez, “es un gasto que se proyecta, es decir, se presupuesta como gastos corrientes dentro de las diferentes instituciones”.
En un escrutinio a los últimos cuatro años en las contrataciones y compras de diciembre realizadas por el Ministerio de Salud Pública, se detectó que en 2018 se pagaron dos servicios completamente diferentes con la misma factura.
Con la orden número B15000000001 se liquidó unas cuñas publicitarias de un mensaje navideño del Big Papi y la contratación de un Stand Up Comedy. El primer servicio fue adjudicado a la empresa INVESTSIDE,SRL por un monto RD $1,151,774.78 y el segundo al señor Julio César Polanco López por la cantidad de RD $94,400.00.
Al cuestionar a Rodríguez sobre la posibilidad de que en esta temporada la demanda masiva de productos y servicios por las instituciones podría ocultar irregularidades, el economista asegura que en lugar de actividades ilícitas lo que se puede presentar es “flexibilización de controles”.
“Se puede dar el caso de que se pierdan algunos controles o se flexibilice algunos controles, no irregularidades, porque cuando hablamos de irregularidades estamos diciendo que la persona no va a hacer las cosas por la vía legal”, sostiene el presidente de la ANED.
Lois Malkún agrega que “el problema no es que tú gaste RD $300,000 en una fiesta. El problema es que el que organiza la fiesta vaya a la empresa que le va a suministrar el bufete y le diga: te estoy seleccionando para que me prepares un almuerzo para 500 personas, pero tú me tienes que dar un 20% de eso”.
Otro punto en el que coinciden ambos especialistas es que, a pesar de que son gastos que se prevén, la fiscalización y la transparencia son vitales para fortalecer la calidad del gasto y los sistemas institucionales.
Siempre hay que auditar, aunque se está actuando con transparencia o con más honestidad, hay que seguir auditando”, sostiene Malkun
En el caso de Rodríguez considera que “deberían ponerse más controles en esos asuntos. Entiendo de que muchas instituciones muchas veces tienen que hacer de tripas corazón para poder hacer algún tipo de celebración a sus empleados, sin embargo, otras instituciones cuentan con recurso prácticamente ilimitados para esos fines”.
Equivalencias
Para tener una idea más tangible de las cifras, con lo gastado en los últimos seis años en Navidad se pudieron haber adquirido:
- Cinco hospitales de la dimensión del moderno Hospital de Las Terranas.
- Más de 54 escuelas como las inauguradas en 2014 en varias provincias del sur.
- Más de 2,000,000 de vacunas Sinovac, cotizadas a 19 dólares la unidad, precio al que las adquirió el Estado.
- El 75% del Teleférico de Santo Domingo.
- Casi el presupuesto mensual que recibe la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
- 18 veces el remozamiento de la Duarte con París (según cifras preliminares).
Reducciones significativas en 2016 y 2020
En el período analizado se encontraron dos años que estuvieron muy por debajo del promedio en lo que a gastos navideños se refiere.
En 2016 y 2020 el presupuesto ejecutado en actividades festivas fue de RD $137,117,339.29 y RD $64,082,369.89, respectivamente. La principal razón a la que se puede atribuir estas reducciones fue que, en estas ocasiones, el gobierno prohibió en las instituciones del estado algunas actividades como la entrega de regalos o las celebraciones propias de esta época.
El 16 de noviembre de 2016, Danilo Medina, en ese entonces presidente de la República, emitió una circular en la que impedía la entrega de regalos navideños, canastas, bebidas y otros obsequios provenientes de fondos públicos.
La disposición fue de carácter obligatoria para todos las dependencias del Poder Ejecutivo y fue firmada por el ministro de la Presidencia de esa gestión, Gustavo Montalvo. La medida excluyó a los organismos y entidades gubernamentales de asistencia social que realizaban las tradicionales compras de canastas navideñas para familias de bajos recursos.
En 2020 la disminución presupuestaria fue la más evidente, y esto no solo se debe a las restricciones establecidas por las autoridades, sino que en este año, República Dominicana se sumergió en la pandemia de la COVID-19 que provocó el cierre parcial de todas las instituciones del país y la eliminación de las aglomeraciones.
En esa línea, la Resolución 163-2020 del Ministerio de la Administración Pública (MAP,) ordenó a las instituciones públicas abstenerse de realizar compras navideñas durante ese período.
Este año sigue vigente hasta el 1 del 2022 el decreto presidencial 396-21, promulgado el 19 de junio de 2021, donde queda prohibido la celebración de fiestas navideñas con objeto de racionalizar el gasto público.
¿El Gobierno tiene que hacer fiestas en Navidad?
Sin lugar a dudas la Navidad une a las personas y les da un sentimiento de compenetración muy fuerte. Esta celebración le da una oportunidad a cada individuo de relacionarse con los demás en entornos sociales abiertos y alegres. A pesar, de lo importante que es celebrar las festividades a nivel personal, surge una pregunta, ¿Las instituciones públicas tienen la necesidad de celebrar la Navidad?
La consultora internacional The great place to work explica que vivir en un entorno donde celebren fiestas y cumpleaños fomenta el compañerismo, el respeto y la buena relación entre los profesionales, además de que crea lazos entre los colaboradores con la marca.
La reconocida psicóloga Ana Simó asevera que este tipo de actividades ayuda a la integración del personal y a crear ambientes laborales amigables. “Para la integración claro que sí, sirven muchísimo las fiestas. A veces la fiesta no tiene que ser muy pomposa: el hecho del 'angelito' o del 'diablito' quita un poco la tensión que se vive día a día en el trabajo y puede mejorar la relación entre dos personas”, subraya la profesional de la salud.
La especialista de la salud mental añade que es recomendable replicar las festividades en los entornos laborales y que el trabajo en equipo es fundamental para el éxito de cualquier compañía. “Al empleado es importante hacerle sentir que no está ahí por un salario un 15 o un 30, yo tengo que hacerte sentir que tu trabajo es importante”, dice.
Simó resalta que, a pesar de los beneficios de celebrar Navidad y otras fiestas en las empresas, la salud mental de una persona no se ve en riesgo de no hacerlo. La experta reitera que “no necesariamente se tiene que ver afectado, lo que sí se puede sentir es desmotivado, puede sentirse que para ellos no es importante el colaborador”.
La psicóloga valora que el Estado debe manejar los recursos de manera más racional, porque destinar fondos de manera excesiva al Gobierno, puede provocar en la población un sentimiento de descontento e inconformidad. “A veces queremos ser ostentosos y en esa exageración lo que se logra es que el ciudadano se sienta burlado, es como que pa´ eto sí hay y esa es una expresión muy nuestra”, dice.
¿En qué se está gastando el presupuesto este año?
Es difícil establecer cuánto ha gastado el Gobierno este año por concepto de gastos navideños, sin embargo, se pueden encontrar algunos de los procesos de compras y contrataciones públicas que llevan a cabo algunos organismos del estado. Por ejemplo, los Comedores Económicos han solicitado RD $419,389,650.00 para la adquisición de alimentos y desechables para ser utilizados en los operativos navideños a nivel nacional.
El Ayuntamiento del Municipio de San Francisco de Macorís lleva un proceso abierto de RD $3,000,000.00 para la adquisición de bonos.
El Ayuntamiento del Municipio de San Cristóbal, por otro lado, requirió RD $960,000.60 para la adquisición de raciones alimenticias para miembros del cuerpo de bomberos, personal de medio ambiente, personal de mantenimiento y personal de conserjería.
El Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil busca RD $500,000.00 para la compra de artículos navideños que serán utilizados para la decoración
La Defensoría del Pueblo lleva a cabo una compra RD $425,000,00 por una contratación artística para amenización del evento “Almuerzo navideño Institucional 2021”, mientras que el Instituto de Desarrollo y Crédito Cooperativo pidió un servicio de almuerzo buffet navideño para 180 personas por la suma de RD $442,500.00. Estas actividades, escogidas de manera aleatoria, suman un total de RD $424,717,150.60.