SANTO DOMINGO, República Dominicana.-  La muerte a tiros del presidente haitiano, Jovenel Moïse, también ha despertado alertas en materia económica. La República Dominicana tiene al vecino país como un aliado de intercambios comerciales que marcan el ritmo económico en las puertas de la frontera, con cerca de 17 mercados binacionales a lo largo de cuatro provincias: Dajabón, Elías Pina, Independencia y Pedernales.

Una de las primeras medidas de seguridad aplicadas por el Gobierno dominicano fue cerrar y militarizar la fronteras terrestre y detener los vuelos hacia y desde Haití, con limitadas excepciones para el traslado de dominicanos y personal diplomático.

“El detener el comercio con Haití tendrá un impacto en las condiciones de vida y económica de la zona fronteriza, por lo cual entiendo que debe dársele seguimiento”, adelanta la economista Magdalena Liranzo, coordinadora del Observatorio de Comercio Internacional (ODCI).

Y especifica que ese seguimiento debe ser a territorios específicos, y productores que trabajan determinados sectores donde las exportaciones hacia Haití son muy relevantes.

Las exportaciones nacionales (no incluye Zona Franca) de República Dominicana hacia el vecino país de Haití se ubicaban a mayo de este 2021 en su mejor momento, al registrar en los primeros cinco meses de este año US$ 208.40 millones, la cifra más alta incluso que en tiempo de prepandemia. La muerte de Jovenel Moïse pueden cambiar este panorama.

La economista Liranzo explica que el comercio haitiano en los últimos años se ha venido reduciendo de manera significativa, dice, cuando en el 2012 se exportaban (nivel nacional y zona franca) alrededor de US$ 1,056 millones desde el país, para el 2019 esa cifra andaba sobre los US$ 820 millones.

“Esto significa que si bien sigue siendo relevante el comercio con Haití, ese impacto es relativamente menor a lo que hubiese sido en otros tiempos”. De todos modos, sostiene, “la situación tiene que preocupar en materia comercial, dado que hay una parte muy relevante de la zona fronteriza, que depende mucho del intercambio comercial con Haití”.

Los vendedores más afectados

“Quienes se vería mayormente afectado serían productores medianos, exportadores pequeños y medianos y también algunas empresas exportadoras de bienes industriales del régimen nacional”, adelanta la coordinadora de ODCI.

La primera reacción al asesinato de Jovenel Moïse en materia económica la dio entonces la Asociación Dominicana de Exportadores (Adoexpo), en palabras de su presidenta Elizabeth Mena: “Definitivamente esta situación tendrá repercusiones en nuestros exportadores por un tiempo indefinido y en la economía de la República Dominicana, hasta tanto se restablezcan totalmente las operaciones”.

Los materiales que concentraron las exportaciones nacionales hacia Haití, para el 2020, y que dan un panorama de las empresas y sectores que se verían más tocados por esta crisis, son el plástico y sus manufacturas, que al 2020 registró US$ 73.35 millones, productos de molinería (US$ 42.65 millones), sal, azufre, tierras, yeso y cemento (US$ 37.94 millones), preparaciones a base de cereales y pastelería (US$ 30 millones), y las Grasas y aceites animales o vegetales (US$ 26.82 millones).