El doctor Vincho Castillo, de la Fuerza Nacional Progresista, ha dicho que el senador Bob Menéndez, de New Jersey, es “un amigo de la República” Dominicana y que no pueden difamarlo por haber escrito una carta al secretario de Estado Mike Pompeo, solicitando evitar que Danilo Medina cambie la Constitución de la República Dominicana.

Y para defender su criterio, el doctor Castillo ha llegado al tono de la amenaza al presente gobierno del presidente Danilo Medina. Ha dicho: “Si quieren pelear, vamos a pelear, se lo advierto al Gobierno, vamos a pelear, y nosotros peleamos con duro, y si hay alguien que en este país puede pelear todavía y tiene elementos para pelear todavía, soy yo”.

Veamos las cosas con más detalles. Cuando el doctor Castillo hablar de pelear, ¿a qué se refiere específicamente? ¿A una campaña de denuestos o a presentar pruebas de documentos que incriminen a sus adversarios?

Además ¿Quién es el que quiere pelear con Vincho?

No lo sabemos. Sólo el doctor Castillo sabe el significado de “pelear” en el contexto dominicano. No estamos en un enfrentamiento violento. Cuando el doctor Castillo tuvo la oportunidad de defender la soberanía dominicana, afectada por la Intervención militar de Estados Unidos, en 1965, no pasó de algunas palabras, pero nada de acción, no arriesgó su vida enfrentando al invasor, como sí hicieron auténticos patriotas dominicanos. De modo que no se refiere a ese tipo de pelea. Y cuando el país no tuvo democracia, porque la dictadura de Rafael L. Trujillo masacraba a todo el que demandara libertad, el doctor Castillo fue uno de sus defensores más acérrimos, y hasta produjo denuncias contra personas que eran supuestamente sospechosas de antitrujillismo. Por sus servicios al Jefe se ganó un puesto en la Cámara de Diputados sin ser elegido por la población.

La otra cuestión que sorprende es que el doctor Castillo ya no ve a nadie más dispuesto a pelear  ni a sacrificarse por sus ideas, pues sostiene que “si hay alguien que en este país puede pelear todavía y tiene elementos para pelear todavía, soy yo”. ¿Cuáles son esos elementos para pelear que tiene el doctor Castillo?

Cualquiera pensaría que habla como abogado, por sus conocimientos legales. Si es así, observemos el siguiente dato: al doctor Castillo le falta actualización, porque las leyes y los códigos han cambiado, al igual que la Constitución. Y en el caso que quisiera hacer uso de los archivos que hizo siendo Director de Ética e Integridad Gubernamental, en la gestión de Danilo Medina, estaría faltando a su deber, pues los documentos los recibió para actuar como funcionario y no para guardarlos y convertirlos en proyectiles políticos cuando les fuera útiles. Hacer eso sería prevaricar, abusar del poder que tenía, y sobre todo, cuando ya no desempeña las funciones de Director de Ética Gubernamental.

De todos modos, sigue siendo muy extraño que el doctor Castillo defienda la intromisión de un senador de los Estados Unidos en los asuntos internos dominicanos, cuando ha sido él quien ha promovido un ultranacionalismo desfasado, que ve intervención extranjera en los asuntos dominicanos en todos los actos de los organismos multilaterales en los que participamos, donde se menciona a la República Dominicana.