El ingeniero Magín J. Díaz, director general de Impuestos Internos, pronunció un discurso en la Cámara Americana de Comercio, que es bastante definitorio de lo que se propone hacer el presidente Danilo Medina en los próximos 4 años en materia fiscal.
Díaz omitió explicar el pacto fiscal, establecido por ley, y dedicó su disertación frente a la cúpula del sector empresarial a razones sobre los cambios urgentes que vienen en materia fiscal, tomando en cuenta que el sistema tributario dominicano -de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional- es inequitativo, ineficiente, insuficiente y está completamente desvirtuado.
Es muy claro el mensaje. Y quienes no lo hayan asumido como fue dicho, probablemente se equivoquen en la toma de decisiones futuras. Otros directores de impuestos han hablado de los rezagos del sistema tributario, pero ninguno lo había dicho con la firmeza con que lo hizo Magín Díaz.
“No hay espacio en esta gestión para tratos privilegiados a nadie: ni empresarios, ni políticos, ni amigos. Es un mandato directo del Presidente y lo pienso cumplir al pie de la letra”. Con las negritas incluidas.
Por tanto, el sector empresarial, los grupos empleadores, los inversionistas extranjeros, los gestores y propietarios e inversionistas de zonas francas, los receptores de beneficios fiscales como el turismo y el sector eléctrico, incluyendo a los comerciantes chinos de la avenida Duarte, deberán leer más de una vez las palabras del director de la DGII, como si hubiesen sido dichas por el presidente Danilo Medina.
“Mis oficinas estarán siempre abiertas para recibir denuncias serias, críticas constructivas y retroalimentación de parte de los contribuyentes. Pero no estarán abiertas para quienes busquen negociar impuestos fuera de la ley o para aquellos que deseen gestionar tratos preferenciales por el simple hecho de tener acceso a mi despacho”. Ojalá que estas promesas se cumplan y tengamos una gestión de la DGII que no tenga contemplaciones por amiguismo o por razones políticas.
Algo que se puede suponer es que en las anteriores gestiones de la DGII pasaba lo que ahora Magín Díaz dice que no ocurrirá. Si fue así, cuáles serían las razones del presidente Danilo Medina para esperar cuatro años antes de realizar este cambio.
Otro aspecto del discurso está relacionado con los bajos salarios que se pagan en la República Dominicana, lo que limita la capacidad recaudatoria del gobierno en la parte de Impuesto Sobre la Renta de las personas físicas. ¿Dispondrá el gobierno aumentos salariales? ¿Impulsará la aprobación de salarios mínimos más ajustados al pago de los impuestos? ¿Por qué Magín Díaz no habló de lo que se propone hacer el gobierno en políticas salariales? Dijo que el salario mínimo promedio en República Dominicana es uno de los más pobres de la región, y que de 1.7 millones de personas que devengaron salarios en el 2015, casi 1.5 millones no pagó un solo centavo por concepto de este impuesto.
El gobierno necesita dinero. Y está decidido a recaudar más. Y no va a someterse a ninguna reducción del gasto público, ni a mejorar la calidad del gasto. No querrá el gobierno que le hablen de nominillas, de empleados por encima de los que necesitan las instituciones, ni de la ración del boa en las obras públicas, ni los CB en las nóminas de los ministerios, ni del pago de nóminas para empleados temporeros. Sencillamente quiere recaudar más, y para ello tiene ahora a Magín J. Díaz como director de la DGII.
Habrá que entender que la DGII contará con recursos para evitar la evasión fiscal en los casos de los profesionales liberales (médicos, ingenieros, abogados, economistas, arquitectos) que pagan pocos impuestos porque cobran en efectivo. Y también habrá que suponer que el gobierno eliminará una gran parte de las exenciones fiscales dirigidas a potenciar sectores clave, como el turismo o las zonas francas.
Cuando termine esta gestión de gobierno es seguro que ya no tendremos “el más amplio, bondadoso y diverso esquema de exenciones tributarias de todo el Continente”, y ya no seremos “el secreto fiscal mejor guardado de toda la región”.
Hay que desearle suerte al gobierno en este empeño recaudador.