Luego de una reunión de varias horas del Consejo Nacional de la Magistratura el procurador general de la República dijo que pedía perdón por su comportamiento frente a la magistrada Miriam Germán Brito, el pasado 4 de marzo, utilizando recursos ilegales que no le estaban permitido ante una evaluación de una magistrada de la Suprema Corte de Justicia.
Lamentable que la sesión del Consejo Nacional de la Magistratura haya sido a puertas cerradas, y que del debate allí ocurrido no hayamos tenido acceso a nada. El señor Jean Alain Rodríguez dijo que pedía disculpas a la magistrada, pero de inmediato se justificó en las violaciones que cometió, y para los efectos de la indignación colectiva y las violaciones a las leyes y a la Constitución, Jean Alain Rodríguez se reiteró en su conducta errática.
No sabemos sobre los argumentos presentados por el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Germán, quien había anunciado previamente que asumiría una posición sobre las violaciones del procurador al debido proceso, y en particular sobre un tema que sigue abierto: Las violaciones a la Constitución y a las leyes, por parte de la Procuraduría General de la República, al violar la intimidad de la magistrada Miriam Germán Brito, al interceptar ilegalmente sus comunicaciones. Nada sabemos de estas flagrantes violaciones ni de la naturaleza de la indignación, si es que la hubo, del doctor Germán y de alguno de los demás miembros del Consejo Nacional de la Magistratura.
Jean Alain Rodriguez se justificó en sus violaciones a los dos reglamentos que rigen la evaluación y en sus violaciones al debido proceso, que es una garantía de carácter constitucional. Es probable que haya sido obligado a pedir disculpas y a inhibirse de la votación del organismo en cuanto a la magistrada Miriam Germán.
El procurador y su gente, incluyendo a Bolivar Sánchez y los que espían a los jueces y demás ciudadanos en franca violación de derechos constitucionales, no han entendido ni quieren entender conceptos básicos, elementales, de derechos. Y si no los manejan debían por lo menos consultar con los que saben y tienen formación sobre la inviolabilidad de los mismos, y en particular la responsabilidad superior que tienen los funcionarios responsables de hacer cumplir con la ley, como es precisamente el caso del procurador general de la República y los subalternos que tiene.
Bien hicieron anoche mismo los consejeros José Ignacio Paliza y Josefa Castillo, del Partido Revolucionario Moderno, al retirarse de la rueda de prensa en que habló el procurador. Ese retiro se produjo porque no cumplió con lo establecido en la reunión, y prácticamente hemos retornado al mismo punto en que estábamos antes de la reunión de este martes del Consejo Nacional de la Magistratura.
La prepotencia, acompañada de un precario respeto por las normas, apartes de las ínfulas que otorga el poder, son los factores que indicen al procurador a su cada más pronunciado hundimiento en la conciencia pública. Reiterarse en el irrespeto a Miriam Germán Brito y su familia, sin tomar en cuenta las violaciones a su intimidad, siguen siendo factores de rechazo de las actuaciones de un jefe del ministerio público que ha perdido legitimidad y reconocimiento, y que sus casos se muestran cada día más débiles.
Ante esta reiteración en la falta de respeto ¿Seguirá indiferente el presidente de la República, Danilo Medina?