Este lunes inicia el año escolar 2014-2015, con bríos adicionales puestos por las autoridades del gobierno con la ampliación del programa de tanda extendida.

En plan piloto de tanda extendida que inició el año escolar 2013-2014 ha debido concluir satisfactoriamente, para que el gobierno decidiera empujar lo que el presidente Medina ha definido como una revolución educativa.

El Ministerio de Educación tiene por delante el gran desafío de demostrar que ha trabajado arduamente para tener sobre rueda a partir de hoy un programa que enriquezca la cantidad de horas que los estudiantes permanecerán en las escuelas.

Es decir, que el currículo para la tanda extendida existe, de la misma forma que el presidente Medina se empeñó en inaugurar centros educativos en todo el territorio nacional, en los últimos meses.

Los centros educativos tienen que haber adaptado su planta física para proveer desayuno escolar y almuerzos a cientos de miles de estudiantes, en condiciones de higiene adecuada, y con contratistas eficientes, que darán el servicio sin que nadie corra ningún peligro por ingerir la comida que se le sirva.

Por supuesto que un elemento importante ha debido ser la formación de los maestros para aportar el plus que hace falta en el programa de tanda extendida. En el magisterio no hay cambios significativos, y el gran reto del ministerio de Educación es completar su programa de formación de maestros a través de las universidades.

El otro gran problema lo representan los libros de textos del sector público. ¿Han sido adaptados al nuevo esquema que representa el aumento de 4 horas diarias de docencia en las escuelas? No lo sabemos, pero sospechamos que es uno de los puntos débiles del Ministerio de Educación en este esfuerzo extraordinario del gobierno, en que se está disponiendo de recursos en forma holgada, partiendo del 4 por ciento del PIB para el sector educativo.

El Ministerio de Educación deberá hacerle frente al gravísimo desorden que existe con los libros de texto, que representan un gran negocio para editoriales, autores y colegios privados, y que de paso puede afectar al sector público. Tanta variación anual en libros impide la continuidad en la formación de los alumnos, y de paso afecta seriamente la economía de las familias.

Los libros deben ser actualizados, por supuesto, a un ritmo trazado por el propio ministerio de Educación a partir del currículo, y no a partir de la ambición de las editoriales, que en ocasiones lo que hacen es cambiar el título y la portada, y aumentan desaprensivamente los precios. De este modo impiden que las familias puedan recurrir a utilizar libros de años anteriores.

El gobierno tiene ante la sociedad un gran desafío. Danilo Medina hizo opción por la educación como su principal interés gubernamental, y es muy bueno. Si todo marcha bien será un gran éxito y Danilo será recordado como el presidente de la educación. Si fracasa este esfuerzo, veremos muchas aristas, explicaciones o justificaciones, pero una que no podrá evitarse será la falta de una gerencia responsable, eficaz, que haya tomado en cuenta la magnitud de este proyecto.

El gobierno ha divulgado este lunes las cifras oficiales de su programa de fortalecimiento escolar:

2.7 millones de niños, niñas y adolescentes inician el año escolar

6,207 nuevas aulas, con comedores y cocinas, han sido incorporadas

422 nuevas escuelas han sido entregadas para el inicio del año escolar

2,100 aulas más que el año pasado, en 282 escuelas reparadas.

10,019 aulas nuevas serán incorporadas "en las próximas semanas".

814,000 estudiantes se incorporan a la tanda extendida este año, en 1,716 escuelas

En 2013 hubo 1,630,456 alumnos que recibieron desayuno escolar diario

Este año se incorporan 600 mil alumnos más al desayuno escolar.

Hay 7,547 millones de pesos para alimentación escolar en 2014-2015

Se tiene programado distribuir 13 millones de libros en dos años.

Se distribuirán 674,000 uniformes y útiles escolares.

454,111 medias y 500 mil mochilas.

Ojalá que esto sea posible, y que las intenciones sean ciertas. Que la educación sea una realidad, como prioridad nacional.