Es un hecho que en medio de la pandemia de coronavirus el poder judicial ha sido de las primeras instancias estatales en dar el ejemplo y continuar operando, con alternativas confiables, como demandan las tantas cuestiones que le corresponde evaluar y decidir.

Hemos visto un gran esfuerzo para continuar los roles judiciales, y la incorporación de soluciones completamente nuevas, incluso para abogados que han demostrado ser duchos en el manejo de las nuevas tecnologías.

Lusi Henry Molina, el presidente de la Suprema Corte de Justicia, ha remitido una comunicación a Acento, en la que hace constar algunos de los avances incorporados en medio de la crisis que vivimos, y que mantiene abierto y en servicio el poder judicial dominicano.

Distinguido licenciado Rosario,

Espero que este mensaje le encuentre en salud a usted y sus seres queridos.

Desde el Poder Judicial, seguimos trabajando para la mejora continua del sistema de justicia.

El pasado martes el Consejo del Poder Judicial aprobó la política para uso de la firma electrónica en los procesos jurisdiccionales y administrativos, estableciendo el marco y los mecanismos relativos a esta herramienta para la digitalización de la operación de la Justicia.

La justicia no se detiene. Seguiremos enfocados en dar garantías del servicio, cuidando la salud y respetando las disposiciones del estado de emergencia.

El instrumento aprobado fue sometido a consulta y vistas públicas en un proceso abierto del 12 al 27 de marzo. El proceso de consenso y acogida de aportes al respecto por parte de instituciones públicas, privadas, usuarios y usuarias, ciudadanas y ciudadanos fue de mucho valor para los ajustes de los órganos de apoyo.

Es oportuno que valoremos la importancia de este paso para la futura puesta en marcha de las plataformas de Servicio Judicial. La política aprobada, disponible en la página Web del Poder Judicial, establece las condiciones generales y mecanismos que deben garantizar el cumplimiento legal, así como las prerrogativas de los acreditados. Los documentos emitidos en dicho marco responderán a una serie de elementos de la seguridad y parámetros de veracidad.

Esta aprobación da inicio a las capacitaciones y sensibilización de los usuarios para asegurar su debido funcionamiento a lo interno  y para lograr la agilización del soporte tecnológico para el Servicio Judicial.

La firma electrónica impactará en los tiempos de salida de las decisiones, sobre todo cuando intervengan varios usuarios o servidores. También agilizará la emisión de certificaciones a terceros e impactará positivamente en la seguridad documental, a través de un protocolo de verificación.

La firma electrónica forma parte del segundo eje del Plan Estratégico Visión Justicia 20/24: “Servicio judicial oportuno y eficiente”, cuyos productos y líneas de acción surgieron de un proceso de diagnóstico, consultas y planificación para los próximos cinco años de trabajo.

La justicia no se detiene. Seguiremos enfocados en dar garantías del servicio, cuidando la salud y respetando las disposiciones del estado de emergencia.

Me despedido reiterándole que contamos con sus aportes y su colaboración para fortalecer este proceso de mejora continua de nuestro sistema.

Atentamente,

Luis Henry Molina

Presidente de la Suprema Corte de Justicia