Parece inminente la aprobación de una ley de Partidos Políticos, en el Senado de la República, que contemple la realización de primarias abiertas y simultáneas para todos los partidos políticos, para la selección de los candidatos presidenciales.
La búsqueda de consenso no logró resultados. Primero se designó una comisión bicameral que gestionara el consenso. No fue posible ese objetivo por las diferencias dentro del Partido de la Liberación Dominicana.
El Comité Político del PLD aprobó crear una comisión de juristas que ofrecieran sus criterios profesionales sobre la constitucionalidad o no de las primarias abiertas y simultáneas. El secretario general ni el presidente del PLD no pudieron cumplir ese mandato, y jamás se pudo anunciar quiénes serían los juristas.
El tema retornó al Comité Político en donde se resolvió dejar libre a los legisladores para que votaran por cualquiera de las opciones, a su libre albedrío. Algo extraño en un partido donde el centralismo democrático siempre rige y la minoría se subordina a lo que decida la mayoría.
Danilo Medina prefiere las primarias abiertas y simultáneas. Leonel Fernández las prefiere cerradas, y de acuerdo al cronograma que tenga cada partido.
Danilo sostiene que las primarias abiertas no violentan ninguno de los principios constitucionales, y Leonel Fernández entiende que si se aprobaran las primarias abiertas el sistema de partidos políticos colapsaría.
Once partidos de oposición emitieron un documento en el que proponen que cada partido pueda decidir el método de elección de sus candidaturas internas o a cargos de elección popular de acuerdo con sus propios estatutos y de acuerdo con la ley. Las primarias pudieran ser voluntarias, simultáneas, vinculantes, con el padrón de cada partido político y supervisadas por la Junta Central Electoral. Y que cada partido tenga un registro de militantes y afiliados y que sea obligatorio entregarlo a la Junta Central Electoral.
Rafael Calderón, senador del PLD y coordinador de la comisión senatorial que hizo el estudio de la propuesta de ley de Partidos y Agrupaciones Políticas, ya informó que la opción escogida es la de realizar primarias abiertas, simultáneas y con el padrón de la Junta Central Electoral. Es la opción que prefiere el presidente Danilo Medina. El camino está claro y habrá ley de partidos y cambios en la Ley electoral para adaptarla a la Constitución, y que sea posible tener elecciones presidenciales en el 2020 con leyes actualizadas.
El senador del PLD José Rafael Vargas, del equipo del presidente del PLD, Leonel Fernández, acaba de denunciar que es inminente la aprobación de la ley de partidos con el criterio del presidente Medina. Entiende que ello favorecerá el clientelismo político, aumentará el costo de las campañas electorales y violentará varios artículos de la Constitución de la República.
Los partidos de oposición se pronunciaron este lunes, anunciando que de aprobarse la ley de partidos como quiere el presidente Medina, los colocaría en posición de resistencia de la nueva ley. Solicitaron priorizar la modificación de la Ley Electoral e insistir en el consenso para la Ley de Partidos.
La Junta Central Electoral ha dicho que casi no queda tiempo para organizar las elecciones presidenciales del 2020 sin la ley de partidos y la modificación de la Ley Electoral. En todo caso habría elecciones con disposiciones administrativas y los miembros titulares (tres varones y dos hembras), sacando “fuerza de las gavetas” para hacer las elecciones con testosteronas masculinas y femeninas.
No ha habido ni habrá consenso en este asunto. Se impondrá la mayoría de senadores y diputados que tienen el poder y acceso al Palacio Nacional, para satisfacción del presidente Danilo Medina. Lo otro, lo que pase dentro del PLD, y la resistencia de la oposición, será lo que queda por verse. Es el momento de las definiciones.