El deterioro y cierre de los museos de la Plaza de la Cultura es una vergüenza. Hace muchos años que el Gobierno sencillamente dio de lado a las labores museísticas, y en particular a los del centro de la ciudad o Plaza de la Cultura, que son cuatro: Museo Nacional de Historia y Geografía, Museo del Hombre Dominicano y el Museo de Historia Natural, además del Museo de Arte Moderno o Galería de Arte Moderno.
Un reportaje publicado este lunes por Acento, sobre las precarias condiciones en las que se encuentra el Museo Nacional de Historia y Geografía, es suficientemente tétrico como para alejarse tanto como sea posible de ese lugar, e incluso, para recomendar a los empleados que allí permanecen, que por su propia salud se retiren cuanto antes de aquel destartalado establecimiento.
Ya se tiene y se cuenta la historia de la muerte a destiempo del director del Museo de Historia Natural, Fernando Luna Calderón, luego de haber sido afectado por las bacterias y los hongos que en su lugar de trabajo adquirió. Otros empleados, con menor fama que Luna Calderon, habrán muerto por las precarias condiciones de esos “centros de educación”.
Miguel Decamps, director del Museo de Historia y Geografía, ha dicho que el presidente Danilo Medina se comprometió a realizar las inversiones necesarias para reparar físicamente el lugar. Lamentablemente, no hay un plan, ni un programa, ni parece aparecer algún cronograma de desembolsos para el 2018. Esos fondos habrían sido incluidos dentro del presupuesto del Ministerio de Cultura. ¿Estará ese ministerio interesado en realizar ese trabajo? ¿Respetará las apropiaciones de fondos para esas reparaciones?
Son preguntas que solo el ministerio de Cultura podrá responder. Son muchas las necesidades que tiene el área cultural, pero igualmente solo algunas actividades parecen prioritarias para las autoridades culturales.
¿Cómo es posible que se haya permitido que los museos oficiales cayeran a un nivel tan bajo como el que han caido, cuanto tenemos un gobierno que promueve el turismo dominicano como prioridad, incluyendo la Ciudad Primada de América, en la que se supone debe haber museos dignos, bien conservados, protegidos y con piezas históricas que reflejen lo que nuestra historia dice que somos?
Recientemente un visitante dominicano, que ha vivido gran parte de su vida en el exterior, quiso recorrer los museos de la Plaza de la Cultura, y lo que describió debe ser motivo de preocupación y de alguna acción de parte de ciudadanos interesados en nuestro pasado y su vonservación, y de parte de las autoridades. Este fue el mensaje que nos escribió, y que aquí publicamos:
Te comentaré un episodio de mi viaje a RD.
Mi esposa llevaba en sus planes tres visitas esenciales.
Dos de ellas eran:
Visitar el Museo del Hombre Dominicano.
(Quizás no es el nombre oficial).
Y la Galería del Arte Moderno.
(Llamada también Museo).
Lo triste del caso es el siguiente.
En el museo antropológico no hay aire acondicionado.
El o los ascensores no funcionan.
La iluminación es paupérrima.
El primer y segundo pisos están cerrados al público.
Eso obliga a los visitantes a subir hasta el tercero.
Usando las piernas, en detrimento de las rodillas.
Algunos de los dioramas no tienen iluminación.
Mi esposa y yo recordamos haber visitado antes ese museo.
Me sentía orgulloso de mi país.
Ahora tengo motivos para estar triste.
De ahí caminamos a la Galería antes mencionada.
Pasamos frente al Museo de Geografía e Historia.
Que está clausurado.
Al llegar a la Galería de Arte.
O como se llame, no tenía aire acondicionado. No tenía elevador funcionando.
¿Cómo se preservan las obras de arte en esas condiciones?
Salimos agotados de ambas visitas.
Huimos hacia el restaurante contiguo.
Es un oasis en medio de la precariedad.
Buena comida; excelente servicio…
Gracias anticipadas por la atención que puedas dispensarle a este grito de vergüenza.
Recibe, amigo, mi acostumbrado sincero abrazo.
Este mensaje es clarísimo, y no necesita de explicaciones o detalles más allá de los que en el mismo se describen. Es una vergüenza que los museos de la Plaza de la Cultura, incluyendo la llamada Galería de Arte Moderno, se encuentren en las condiciones que aquí se describen. Y peor aún, que no haya planes, que no se tenga certeza de cuanto tiempo más estarán estos lugares en deterioro.
Las piezas museográficas que existen en estos lugares se están perdiendo. Solo hay que mirar las galerías fotográficas con el deterioro de estos lugares y las condiciones en que se almacenan piezas históricas. Que vergüenza.