El método científico no es el único recurso legítimo para abordar tanto el mundo exterior como la conciencia individual, pues tenemos otras maneras válidas de aproximarnos al objeto particular de estudio: las artes, por ejemplo. Sin embargo, el método científico es valioso por muchas razones que lo distinguen de todas las demás formas de conceptualizar. Es un sistema siempre abierto a la mejora, pues no pregona verdades absolutas sino aproximaciones progresivas que permiten explicar, pronosticar y en algunos casos controlar mejor los diversos fenómenos observables. En lugar de pontificar, decretar o negociar, el papel del científico es siempre cuestionar modelos existentes y postular renovadas explicaciones a medida que la capacidad de observación y experimentación revelan nuevos elementos a ser tomados en cuenta. El pensamiento científico procura incesantemente mejores instrumentos de observación y medición que permiten una aproximación más precisa al objeto de estudio, y modelos sucesivos complementan o suplantan los anteriores que quedan como referentes históricos.

Una sociedad que ignora o manipula la ciencia para impulsar agendas ideológicas pone en peligro su futuro. Se ha comprobado una y otra vez la peligrosidad del ejercicio de control sobre la investigación científica por el estamento militar, el gobierno civil, o la jerarquía eclesiástica. Quien financia la ciencia no debe imponer criterios ni exigir resultados determinados, en eso se diferencia de la tecnología. El pensamiento científico prospera en un ambiente de plena  libertad democrática, estimulando la activa participación- sin temores ni vacilaciones-  de todas las personas e instituciones interesadas en el debate basado en la observación sistemática y la experimentación y medición precisa, sin intenciones ulteriores. Cualquier impedimento al libre intercambio de información es una estocada debilitante para el progreso de la ciencia.

Estados Unidos es el país líder mundial en investigación científica, invirtiendo mucho más de 400,000 millones de dólares al año, según los datos de la OCDE. Dedica el 2.8% de su PIB a la ciencia;  publica más de 500,000 estudios científicos al año. Atrae a miles de talentosos investigadores de todos los rincones del mundo por las facilidades que tradicionalmente ofrece en sus agencias federales, institutos y universidades, donde prima un ambiente de libertad académica. La comunidad científica es espina dorsal del liderazgo mundial y orgullo de Estados Unidos.

Todos nos beneficiamos de su estratégico aporte al conocimiento, pues la ciencia sirve a la humanidad trascendiendo todas las fronteras sin prejuicios. A todos nos concierne lo que ocurre actualmente en la comunidad científica estadounidense, que se siente amenazada por el anticipado cambio drástico en las políticas públicas referente a la ciencia. Los científicos están alarmados a tal grado por las señales que salen de Washington, que empiezan a movilizarse por las redes e incluso a organizarse para marchar públicamente en la capital federal en protesta por los muros que el gobierno pretende erigir para controlar el libre tránsito de ideas e información.

Es un espectáculo poco común observar a científicos “energizados y activos”-en plena rebeldía- combatiendo las pretensiones del recién inaugurado gobierno de cambiar las reglas de juego de la investigación y su divulgación. Conocíamos la revolución científica que ha impactado nuestras vidas con sus asombrosos  hallazgos en los últimos siglos, pero la rebelión de científicos es un fenómeno nuevo. Con su resistencia a las directrices emanadas de Washington la comunidad científica ha logrado un masivo apoyo en las redes con cientos de miles de seguidores que apoyan su rebeldía, dispuestos a marchar por la ciencia. Todos debemos mantenernos atentos y apoyar la lucha de la comunidad científica para asegurar que no se degrade el ambiente de libertad académica y se cierren las fuentes de financiamiento para la investigación científica en Estados Unidos, pues todos sufriremos las consecuencias si se detiene la marcha del progreso basado en el conocimiento mediante el método científico.

¡Marchemos todos en solidaridad con los científicos en Estados Unidos!

Lecturas:

http://www.infobae.com/america/eeuu/2017/01/27/536887/

http://elpais.com/elpais/2017/01/26/ciencia/1485424411_820201.html

http://www.elmundo.es/ciencia/2017/01/26/588a3ead22601dc52b8b4624.html

http://www.bbc.com/mundo/noticias-38759732

http://www.technologyreview.es/negocios/52912/trump-no-ha-nombrado-ningun-consejero-cientifico/

http://www.elespanol.com/ciencia/salud/20170123/188231862_0.html

http://www.voanoticias.com/a/eeuu-cientificos-protestan-activistas-facebook-marcha-ciencia/3695035.html

http://rpp.pe/ciencia/mas-ciencia/la-ciencia-afirma-que-la-tortura-no-sirve-para-conseguir-informacion-noticia-1026667

http://news.nationalgeographic.com/2017/01/scientists-march-on-washington-national-parks-twitter-war-climate-science-donald-trump/