Un maestro del periodismo, pero más que eso, es un hombre honesto, pulcro, profesional, digno, con educación democrática, con vocación de servicio y con un compromiso político-democrático con su país, independientemente de las banderías políticas.

En las últimas semanas unos improvisados e inmorales han intentado agredir a Juan Bolívar Díaz y a su familia, por el simple hecho de haber aceptado una invitación del gobierno de Danilo Medina para que participe, honoríficamente, en una comisión de veeduría o de observación de las actividades administrativas del Ministerio de la Presidencia.

Más que a Juan Bolívar y a su esposa, la dignísima licenciada Ada Wiscovicht, los agresores se escudan en estas dos personas para atacar al presidente Danilo Medina y a su ministro de la presidencia, Gustavo Montalvo.

Los aportes de Juan Bolívar Díaz al periodismo, a la democracia, al debate decente y documentado han sido y siguen siendo más valiosos que todas las canalladas que se intenten para mellar su entereza, valentía e inquebrantable fe en la democracia dominicana.

Le animamos a seguir adelante y a no dejarse extorsionar.

Un comentario: