La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) sirve al pueblo dominicano, y por tanto, es financiada por el Estado para que forme a los profesionales que el país necesita.
La universidad se entiende como un faro de luz que ayuda al pueblo a encontrar la redención, el bienestar y la sabiduría. Sus aulas son consideradas un espacio para el conocimiento, la ciencia, la búsqueda de la verdad y de la libertad.
Como es la universidad estatal, la UASD debe colocarse a tono con los proyectos y programas de desarrollo del Estado. Por ejemplo, servir en su sector y en su tarea con la Estrategia Nacional de Desarrollo, e investigar cuáles son las áreas de mayor crecimiento potencial del país para formar profesionales que cumplan los requisitos que las mismas requieran.
La universidad la integran personas. Autoridades, profesores, estudiantes, empleados que facilitan el desenvolvimiento normal de las actividades académicas.
Desde hace muchos años la UASD ha requerido apoyo estatal para cumplir con sus obligaciones con autoridades, profesores, estudiantes y empleados. Muchos estudiantes han perdido la vida en la demanda de presupuesto, lo que siempre habrá que lamentar.
La UASD recibe un presupuesto anual superior a los 7 mil millones de pesos. El gobierno tiene que acudir con frecuencia con aportes adicionales para resolver excesos en los gastos universitarios o para construir edificios, laboratorios y otras demandas.
La UASD demanda muchos recursos. Y seguro que si recibiera el doble del presupuesto que tiene ahora seguiría demandando más recursos. Pareciera que se ha convertido en un barril sin fondo. Las denuncias de maestros, autoridades y estudiantes es que en la UASD hay mucha corrupción, y mucha gente viviendo del dinero que recibe la UASD del Estado, sin entregar nada a cambio.
La UASD debía ser la universidad más comprometida con la calidad docente a nivel superior. Y la impresión que se tiene es que hay muchas carreras en las que la UASD se queda por debajo del promedio, en relación a universidades privadas dominicanas.
Admitirlo resulta difícil, incluso para quienes han conocido por dentro la UASD, y han sido testigos del despilfarro de los fondos públicos. Muchos profesores con calidad, y que actúan con mucha responsabilidad. Pero hay otros sin calidad docente, sin formación suficiente, sin producción académica, que han convertido a la institución, y a los estudiantes, en una fuente de enriquecimiento. Porque a ambos los exprimen, los extorsionan con folletines, fotocopias y repeticiones ideologizadas, carentes de valor académico y muy lejos de los objetivos de una universidad que se dice a sí misma que sirve al pueblo dominicano.
Si la UASD no resuelve por sí misma sus diferencias, si no entiende que el diálogo es la vía más razonable para ponerse de acuerdo sobre el debate salarial, está quedando descalificada para aportar soluciones a los problemas que se le planteen desde el Estado, y que se les pida cooperación.
Incluso, sin que se le pida apoyo, la obligación de la UASD es darle seguimiento y apoyo a las tareas que emprenda el Estado. Ahora, por ejemplo, se requiere elevar la calidad docente de la educación inicial y media. Tanto para el Estado como para los colegios privados, la UASD debería tener un plan y aportar profesionales capacitados.
Sin embargo, desde que se inició el último semestre, la UASD ha estado paralizada porque los profesores iniciaron una huelga demandando mayores salarios. Lo correcto es que la UASD atienda la demanda, y lo haga a partir de una evaluación docente, que posibilite determinar quién es quién en el profesorado. Esa podría ser una transacción con los directivos de la Federación de Profesores de la UASD.
La universidad estatal está obligada a sanearse, y recuperar parte de sus bienes que han sido negociados o robados, e incluso entregados a profesores y pretendidos profesores.
¿Cuántos planes de viviendas para profesores ha ejecutado la UASD? ¿Dónde están los terrenos de la finca experimental de Engombe de la UASD? ¿Qué ocurrió con la fábrica de quesos que tenía la UASD? ¿Y la finca de agronomía de la UASD? ¿Quiénes la usufructúan hoy día?
Son temas para debatir, con miras al futuro de la UASD. Esa academia no puede seguir como va, o sencillamente le corresponde al Estado poner las condiciones para la entrega de los fondos.