El presidente del Comité Dominicano de Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), Edwin Espinal Hernández, remitió una comunicación a Acento, pidiendo rectificar algunos conceptos emitidos por el editorial del 5 de junio 2018, titulado “La ciudad Colonial de Santo Domingo”. A ese editorial le siguió un segundo, el 6 de junio, titulado "Mejorar el uso de los espacios en la Ciudad Colonial y crear el Museo de los Henríquez Ureña".
Acogemos las explicaciones, las agradecemos, aunque obviamente estarían faltando datos sobre lo que realmente estaría realizándose en el área que ocupaban siete viviendas ubicadas entre las calles 19 de Marzo, Padre Billini y Duarte, de la Ciudad Colonial, que han sido adquiridas por alguien con mucho dinero, y que nos aventuramos al final de este editorial con un posible nombre del adquiriente. Dos de las viviendas fueron demolidas y otras se encuentran en proceso de restauración y embellecimiento.
Edwin Espinal Hernández, presidente de ICOMOS, nos informa que la Casa del Tapado y otras colindantes están siendo restauradas por el arquitecto José Manuel Batlle Pérez, el mismo que realizó las remodelaciones de Las Casas del Siglo XVI, y quien ha sido presidente del ICOMOS y actualmente es su vicepresidente, quien tiene más de 30 años de ejercicio profesional. Explica que se han cumplido las normas nacionales e Internacionales en materia de conservación de edificios históricos y ha recibido la previa aprobación de la Dirección Nacional de Patrimonio Monumental y de la Dirección de Patrimonio Cultural y Centro Histórico del Ayuntamiento del Distriti Nacional.
Explica Espinal Hernández que no es dudoso el trabajo de recuperación que se desarrolla en los inmuebles mencionados, y que se realizarán por etapas y que los diseños se enviarán a las oficinas rectoras de la Ciudad Colonial para fines de aprobación.
Que se ha realizado una extensa labor arqueológica que ha contado con la observación y presencia de arqueólogos reconocidos, entre ellos Pierre Denis, Juan López, Francisco Coste, Alexa Voig, Santiago Duval e Idelfonso Ramírez, todos ellos coordinados por el arquitecto Batlle Pérez, con el fin de optimizar los resultados logrados. Se han descubierto vestigios arqueológicos que han arrojado una invaluable información sobre estos inmuebles, dice la carta. Y serán publicados oportunamente.
También explica que los muros demolidos son recientes y sin valor patrimonial, y para tumbarlos han contado con la aprobación de las autoridades.
Que se trata de un proyecto que está en sus fases iniciales de anteproyecto, y que será en las “próximas semanas cuando se someta el proyecto de adecuación de los inmuebles ante las instituciones responsables”. Son seis inmuebles y dos han sido demolidos con autorización de las autoridades. El espacio abarca casi una cuadra completa.
Sobre el uso de cemento en los pisos explica que sólo se ha colocado un firme para las futuras áreas a pavimentar en exteriores e interiores. También dice que no hay nuevas áreas construidas, “solo unas pasarelas sobre los vestigios arqueológicos encontrados”.
De acuerdo con Edwin Espinal el editorial de referencia no se corresponde con la realidad y pide rectificarlo, en atención al derecho de réplica que garantiza la ley 6132, sobre expresión y difusión del pensamiento. Que conste en esta nota que hemos acogido su solicitud.
La Ciudad Colonial es un patrimonio importante de la República Dominicana. Tenemos derecho a saber en qué consiste el proyecto que allí se realiza, sobre todo si ya ha habido la demolición de dos viviendas, autorizadas por el Ayuntamiento del Distrito Nacional.
En las solicitudes de los constructores se habla “consolidación” de los inmuebles No. 151 de la calle Padre Billini, 151 de la calle 19 de Marzo, 153 de la calle Padre Billini, 157 de la calle 19 de Marzo, No. 2 y 4 de la calle Duarte. También la demolición de los inmuebles No. 6 de la calle Duarte, y demolición de la vivienda No. 153 de la calle 19 de Marzo.
La subdirectora técnica de Patrimonio Monumental, arquitecta Leticia Tejeda, escribió estas acciones implican “la restauración y recuperación de siete inmuebles de gran valor patrimonial en esta manzana de la Ciudad Colonial y propone una galería privada donde se pondrán en valor artefactos recuperados durante los minuciosos estudios arqueológicos realizados en estos predios”.
La aprobación, dice la subdirectora, fue adoptada “de modo excepcional” para la transformación de los inmuebles. Y de ese modo se autoriza también “unificar en un solo inmueble las necesidades de estacionamiento del proyecto”, y le pide considerar la posible apertura al público de la galería propuesta, que recree los hallazgos de tan importante intervención.
Por lo visto, quien está realizando estas obras tiene mucho poder que las autoridades apenas pueden sugerir acciones como estas últimas, y todavía no se sabe quién es el dueño de las obras ni cuáles son los propósitos de las mismas. Cuando el personal de Acento preguntó a quienes realizaban los trabajos no tenían tampoco idea, y se atrevieron solo a comentar que allí se instalaría una galería de arte. Obvio que no es así.
Las indagaciones de Acento indican que ni las autoridades ni los arquitectos, y tampoco ICOMOS, están autorizados a revelar los nombres de los adquirientes de los inmuebles. Es posible que se trate del empresario de origen libanés Iskandar Safa, nacido en El Líbano en 1955 y cabeza del grupo empresarial Privinvest Group. Si fuera así no hay nada de malo que este empresario se instale en la Ciudad Colonial. ¿Cuál es el misterio? Y que el señor Safa está casado con la fotógrafa y embajadora dominicana durante varios años en los Emiratos Árabes Unidos, señora Clara Martínez Thedy de Safa.