La lucha contra el racismo pierde al más grande de los luchadores por la libertad: Nelson Mandela, fallecido este jueves en Sudáfrica.

Nuestro homenaje y reconocimiento a un ciudadano del mundo, a un ángel inmenso de la libertad, que sirvió de ejemplo y bandera a los sudafricanos y a  todos los seres que en el mundo reclamaban libertad y dignidad.

Escribió dos veces sus memorias. Al final su libro El Largo Camino de la Libertad cuenta su historia, la historia de su pueblo, su lucha, su integridad y sus vicisitudes. Fue apresado en 1964 y luego en 1968 y se mantuvo bajo prisión durante 27 años, viendo morir asesinados a Martin Luther King, a Malcolm X, a John F. Kennedy, en un período de efervescencia política. Miles de sudafricanos murieron en las calles de su país luchando por la libertad y reclamando la libertad de Mandela.

Oliver Tambo y Nelson Mandela se convirtieron en las dos figuras emblemáticas de la Sudáfrica del apartheid, acompañadas por el arzobispo Desmond Tute.

Alcanzó la libertad de su pueblo, y logró el entendimiento con el diálogo y la unidad nacional. Hoy su país lo reconoce como el libertador. Terminó la segregación racial sin violencia, rehusó la venganza e impuso, con su ejemplo y su sabiduría, el espíritu unitario que pocos creían posible.

Se enfrentó a sus propios compañeros que deseaban la venganza, y él mismo fue ejemplo para evitar aquello, porque injustamente había sufrido 27 años de cárcel, había perdido parte de su familia, y mantuvo su visión y dignidad pensando en su pueblo.

Gloria a la memoria de Nelson Mandela, precisamente ahora cuando algunos hombres y mujeres requieren o necesitan saber más de su ejemplo, en especial en estas tierras caribeñas, tan lejanas a la Sudáfrica de este hombre inmenso.

Paz a sus restos: