El día del maestro se celebra hoy, cuando han cesado en sus actividades las escuelas públicas y privadas del país, por haber terminado el año escolar correspondiente a la primera mitad del 2011. El próximo año escolar debe iniciar en agosto, según el calendario del Ministerio de Educación.

Lo que se debate en este momento es el aumento en los precios de las tarifas de los colegios privados. Todo ha subido, como consecuencia de los precios internacionales del petróleo, de los aumentos de impuestos y del incremento general del costo de la vida. El Ministerio de Educación ha dicho que el aumento no debe pasar del 10% en relación a los precios del año pasado, pero los colegios privados entienden que el incremento debe rondar el 15%.

El debate sobre la educación sigue. La Coalición por una Educación Digna realizó la pasada semana un concierto en Santiago, estimulando la continuidad de la demanda del 4% del Producto Interno Bruto para la Educación. Cuando el presidente de la República, Leonel Fernández, sometió el proyecto de aumento de los impuestos, para captar 9,500 millones de pesos adicionales, dijo que una parte de esos recursos se utilizarían en la educación. Miembros del Congreso Nacional quisieron especializar esos fondos, cuando se aprobó el paquetazo, para la educación en la propia ley que se estaba sancionando. Los miembros del partido de gobierno se negaron. Es decir, los fondos no son para la educación.

Funglode, la fundación del presidente Leonel Fernández, ha traído expertos sobre educación a debatir sobre la calidad de la enseñanza, pero esos extranjeros insisten, casi como si conocieran al dedillo la realidad dominicana, que los recursos son fundamentales para conseguir la calidad de la educación.

Un reciente estudio, realizado por el economista Jefrey Lizardo para FLACSO y EDUCA, determinó que en las escuelas dominicanas, mientras mejores son las condiciones físicas y mayor es la calidad de los maestros, más calidad se registra en los alumnos que de ellas egresan. Sin embargo, eso no es todo. La República Dominicana se encuentra entre los países de más baja calidad de la educación en los ranking regionales que se hacen cada año.

Es cierto que si se englobara la inversión del Estado en educación pública inicial y secundaria, en educación superior y en infraestructura para mejoría de las escuelas, tomando en cuenta los aportes que se realizan al Infotep y a las universidades privadas, es probable que el por ciento dedicado a la educación alcance el 4% del PIB. Pero lo que la sociedad demanda es que el Ministerio de Educación reciba el 4% del PIB o el 16% del presupuesto nacional de cada año, como lo establece la Ley General de Educación.

Es necesario mantener vivo el debate sobre la educación. Y el día del maestro es una oportunidad para recordar que la educación sigue siendo fundamental para el desarrollo de la República Dominicana. Y que sin un sistema educativo fortalecido, con maestros bien pagados, alumnos bien alimentados, textos escolares bien escogidos, no habrá patria libre y próspera, como aspiramos todos los dominicanos.