Los aspirantes a posiciones electivas municipales, especialmente los aspirantes a alcaldes, han tenido que depositar en la Junta Central Electoral sus respectivos programas de gobierno local, como parte de lo establecido en la nueva legislación electoral.
Ese solo hecho ha representado un avance en la contienda electoral municipal.
Quienes aspiran, mujeres y hombres, han sustentado la promoción política a las propuestas que han entregado, y las prioridades que cada uno estableció. Algunos han puesto el énfasis en resolver el problema del congestionamiento y desorganización del tránsito vehicular en la capital, otros en la recuperación del espacio público, y otros en la recogida de los desperdicios sólidos.
Esto en el caso del Distrito Nacional. En el caso de la Santo Domingo Este, Santo Domingo Oeste o Santo Domingo Norte otras son las propuestas y las prioridades. Cementerios, mercados, limpieza, parques, recogida de basura, recuperación de espacios públicos.
En ese sentido hay que valorar como un gran paso adelante esta campaña municipal en marcha, con empoderamiento de quienes aspiran en temas que importan a los ciudadanos, y que tienen que ver con sus vidas, la calidad del ambiente, de los productos que consumen y el estado de sus calles. Hoy resulta valioso que las autoridades locales también incluyan iluminación de las calles y creación de ambientes seguros para los que caminan hacia sus casas o realizan ejercicio.
Lo que nos falta ahora es la confrontación de esas ideas, su viabilidad, el presupuesto, y la discusión que necesitamos sobre los roles que tienen las alcaldías, los consejos municipales, en tanto el gobierno central también ejecuta políticas que mejorar los municipios.
Otra cosa tiene que ver con la función y el rol positivo que podría jugar la Liga Municipal Dominicana como instancia asesora de los ayuntamientos a nivel nacional. Son otras cuentas, y en realidad corresponderá al gobierno por vía del Ministerio de Interior y Policía, más el cumplimiento de la ley 176-07, sobre los municipios, funciones y alcance de los mismos en el presupuesto nacional. Que lamentablemente no se cumple. Mientras tanto, la campaña electoral y la atención de los candidatos marcha correctamente.