Quien haya leído con detenimiento o por lo menos parcialmente el expediente de acusación contra el senador Félix Bautista y compartes, depositado ante la Suprema Corte de Justica por la Procuraduría General de la República, sabe que contiene asuntos serios que deben ser llevados a un tribunal. (ver: Lea completo expediente contra Félix Bautista por corrupción y lavado)
No estamos afirmando de entrada que los acusados sean culpables, porque eso le corresponde a la justicia.
Lo que creemos es que, dada la gravedad de las acusaciones, que el Ministerio Público se cuidó de sustentarlas, si ese expediente es descartado sin que se discuta en un juicio de fondo, se hará un flaco servicio a la sociedad.
En primer lugar porque los funcionarios del Ministerio Público podrían desalentarse a la hora de recibir denuncias y querellas relacionadas con posibles hechos de corrupción, ya que darían por descontado que a la justicia dominicana no le interesa enviar este tipo de expedientes a juicio de fondo.
No estamos afirmando de entrada que los acusados sean culpables, porque eso le corresponde a la justicia
En segundo lugar, se enviará un pésimo mensaje a la sociedad, a la gente honrada y decente que trabaja todos los días, que paga sus impuestos, que cumple con su deber y respeta las leyes.
A esa ciudadanía se le estaría advirtiendo que ser decente no hace a nadie mejor, no compensa, porque sólo basta conseguir fortuna sin importar las vías que se utilicen, para colocarse por encima de las leyes a la vista de todos. A más dinero, menos posibilidad de ser llamado a investigación, y mucho menos llevado a juicio.
Y en tercer lugar, para los propios acusados sería perjudicial, porque siempre quedaría la duda de si sus riquezas tienen un origen decente o provienen de actividades ilegales o espurias.
Pero si el caso es llevado a juicio y los imputados son descargados, tendrían el derecho de proclamarse inocentes y hasta exigir el respeto que ahora una gran parte del país les ha perdido.
De paso, sus más cercanos compañeros de causa política también se beneficiarían, y no tendrían que seguir manteniéndolos alejados cuando asisten a mítines y a otras reuniones públicas.
En el caso de que se produzca una condena, una vez probados los hechos en un juicio público, oral y contradictorio, se sentaría un importante precedente que adecentaría por lo menos un poco a la sociedad dominicana, en especial al país político y a sus vínculos empresariales.
Por estas razones, a todos los involucrados y a la sociedad en su conjunto conviene que el caso Félix Bautista y compartes sea debidamente debatido y aclarado en los tribunales.