Nueva York, 6 feb (EFE/Helen Cook).- La bolsa neoyorquina sufrió hoy los efectos de la incertidumbre que vive EE.UU. desde la elección del presidente, Donald Trump, después de un periodo de entusiasmo de los inversores.
Aunque inicialmente la llegada a la Casa Blanca del empresario neoyorquino fue bien recibida y los indicadores de la bolsa subieron como la espuma, el parqué neoyorquino parece ahora estar ahora de capa caída, cansado de esperar a las acciones concretas del mandatario.
El Dow Jones de Industriales, su principal indicador, cedió 0,09 % y terminó en 20.052,42 puntos, mientras el selectivo S&P 500 bajó 0,21 % hasta 2.292,56 enteros.
Al índice compuesto del mercado Nasdaq no le fue mucho mejor, y se dejó 0,06 % al perder 3,21 unidades hasta 5.663,55 puntos.
Las polémicas que está protagonizando el presidente Trump, que en los últimos días ha criticado a varios de los miembros del sistema judicial estadounidense y que ha defendido a su homólogo ruso, Vladimir Putin, tampoco ayudan a crear un clima de confianza en la nueva administración.
Tras no recibir noticias de las medidas prometidas por Trump para acelerar la economía estadounidense, como la reducción de impuestos o el desarrollo de infraestructuras, el parqué neoyorquino se ha centrado en los últimos números que se han dado a conocer en la temporada de resultados empresariales.
Las cifras son más bajas de lo que se esperaba, como ha sido el caso de Apple, cuyos beneficios se redujeron en 2,6 % en el último trimestre con respecto al año anterior, mientras que la mítica joyería Tifanny’s tampoco alcanzó su objetivo.
Esto, unido al incremento de la tasa de paro que se dio a conocer la semana pasada, está aumentando las dudas de los inversores.
Salvo el tecnológico, que avanzó un mínimo 0,01 %, el resto de los sectores en Wall Street terminaron en números rojos, entre los que destacaron el energético (-0,91 %), el financiero (-0,36 %), el industrial (-0,28 %) o el de materias primas (-0,18 %).
Las polémicas que está protagonizando el presidente Trump, que en los últimos días ha criticado a varios de los miembros del sistema judicial estadounidense y que ha defendido a su homólogo ruso, Vladimir Putin, tampoco ayudan a crear un clima de confianza en la nueva administración.
Además, según apuntan cada vez más expertos, los miembros del nuevo Gobierno no está lo suficientemente preparados como para liderar EE.UU. durante los próximos 4 años. EFE