Nueva York, 6 jul (EFE/Helen Cook).- Wall Street cerró este jueves sus tres indicadores en terreno negativo después de una sesión bursátil marcada nuevamente por el descenso de las grandes empresas tecnológicas, que en las últimas semanas han sufrido una importante fuga de capitales en favor del sector bancario.
El Dow Jones de Industriales, el principal índice del parqué neoyorquino, bajó 0,74 % y perdió más de 158 puntos afectado especialmente por el declive de grandes empresa como United Health, Walt Disney, 3M o Apple.
Los otros dos índices de importancia también registraron un marcado declive, con un descenso de 0,94 % del S&P 500 y un retroceso de 1 % del Nasdaq.
Aunque el sector tecnológico fue el único que terminó en verde gracias al ascenso meteórico de empresas como Altaba, que subió más de 134 %, buena parte de las principales compañías tecnológicas volvieron a anotar pérdidas.
Facebook bajó 1,01 %, Alphabet (la matriz de Google) 0,49 %, Netflix 0,92 %, Apple 0,94 %, y Microsoft 0,74 %, una tendencia a la que Wall Street empieza a acostumbrarse.
Esta vez se unió también Tesla, que cayó 5,58 % después de que algunas consultoras, como Goldman Sachs, apuntaran en los últimos dos días que los resultados del segundo trimestre del año son decepcionantes.
Hasta hace poco, el sector tecnológico era la niña bonita del parqué neoyorquino al considerarse inversiones seguras y estables por los buenos resultados presentados, pero el pasado mes han caído alrededor de 4 % con las dudas que suscita su elevado precio.
También cayeron hoy con fuerza el sector energético, que retrocedió 0,73 %, y el sanitario, que bajó 1,26 %.
Dado que la tendencia negativa de Wall Street cada vez es más frecuente, algunos analistas e inversores empiezan a pensar que el rally que vivió durante buena parte de la primera mitad de 2017, tras la elección del presidente estadounidense, Donald Trump, no continuará el resto del año.
Apuntan que a la posible ralentización de Wall Street contribuiría una combinación de unos datos de crecimiento económico mediocres y el incremento de los tipos de interés de la Reserva Federal estadounidense (Fed). EFE