SANTO DOMINGO. Los empresarios Juan Vicini y Fernando Capellán, y el economista Roberto Despradel coincidieron en que urge la necesidad de aprovechar las facilidades de impuestos y la ubicación estratégica de la zona fronteriza Domínico-Haitiana.
Al participar en el Diálogo INTEC para la Acción (DIA) titulado “La frontera: de problema a oportunidad”, que organizó el Instituto Tecnológico de Santo Domingo, los panelistas aseguraron que existe una posibilidad para generar entre 300 y 400 mil empleos a corto plazo con inversiones estratégicas en la industria textil.
Durante su conferencia “Oportunidades en ejecución”, el empresario Fernando Capellán, presidente Grupo M, de República Dominicana y de la empresa de zona franca Compagnie Développement Industrie (CODEVI), de Haití, propuso la instalación de una mesa redonda, que permita alinear las metas y propósitos para alcanzar el desarrollo en ambos países, y aprovechar la oportunidad de crear entre 300 y 400 mil empleos.
“Entre Cabo Haitiano y Bonao nosotros podemos definitivamente crear entre 300 y 400 mil empleos en poquísimo tiempo. La fábrica de tela de Heins que está en Bonao, la de Hildan que está en Monte Plata, la de Santiago y una compañía coreana que está en Barahona. Si no fuera por Haití no existieran esas fábricas en República Dominicana, los empleos que hay en zona franca Las Américas, San Isidro, Barahona y Santiago tampoco existieran pues no habría masa crítica”
Describió el caso de la empresa de zona franca CODEVI, que en solo diez años ha alcanzado los 11 mil empleados y recibe en sus instalaciones a empresas de más de diez países, para la fabricación de distintos tipos de productos.
Capellán destacó la condición privilegiada de la zona fronteriza particularmente para la industria textil, por su cercanía con Estados Unidos, principal importador mundial de ese tipo de productos, y por la facilidad de exención de 30% de impuestos que tienen los productos procedentes de Haití con acuerdos como el DR-CAFTA, Hope/Help legislación especial de Estados Unidos para Haití, EPA de Europa, LDC de Chile y Canadá.
“Entre Cabo Haitiano y Bonao nosotros podemos definitivamente crear entre 300 y 400 mil empleos en poquísimo tiempo. La fábrica de tela de Heins que está en Bonao, la de Hildan que está en Monte Plata, la de Santiago y una compañía coreana que está en Barahona. Si no fuera por Haití no existieran esas fábricas en República Dominicana, los empleos que hay en zona franca Las Américas, San Isidro, Barahona y Santiago tampoco existieran pues no habría masa crítica”, puntualizó Capellán.
En iguales términos se expresó el director del Consejo Económico Binacional Quisqueya, empresario Juan Vicini, quien puntualizó que la tendencia mundial ha llevado a la manufactura ligera a buscar localidades de producción que estén cercanas a los puntos de consumo, la frontera podría atraer inversión de manufactura para exportar principalmente al mercado norteamericano.
Propuso el inicio de un fondo de inversión piloto de $75 millones de dólares, para dedicarse a estructuras de carácter habitacional, urbano, logística, seguridad y control fronterizo, que se implemente por una alianza público-privada. Indicó que el fondo debe ser administrado por especialistas, representantes del sector privado, las entidades estatales con impacto e influencia en el desarrollo fronterizo, importación y comercio.
“El ejemplo de inversión de CODEVI de manufactura ligera para productos competitivos para el mercado norteamericano del lado haitiano, combinado con valor agregado en República Dominicana, y aprovechando las infraestructuras logísticas, de importación y de seguridad jurídica dominicana, la visión seria multiplicar eso y replicarlo para generar empleos de ambos lados”, expresó Vicini.
El economista Roberto Despradel, vicepresidente de Despradel & Asociados (DASA) y asesor de Comercio Externo, ofreció la conferencia “La Frontera como fuente de oportunidades en vez de problemas”, dijo que la frontera requiérela definición de “reglas del juego claras” que permitan facilitar el comercio, en beneficio para ambos países.
El Diálogo DIA es coordinado por el Centro de Gobierno, Empresa y Sociedad (CEGES) del INTEC, con la moderación del pasado rector Rafael Toribio. La actividad tiene el objetivo de provocar el debate de diversos temas de la realidad económica, política y social del país y de aportar soluciones.