Montevideo (EFE).- El presidente uruguayo, José Mujica, defendió el viejo dicho "como el Uruguay no hay" por su situación educativa, sanitaria y social en el continente americano, fruto de su política redistributiva que obliga a los que tienen más a "repartir".
El mandatario se expresó así durante su habitual alocución radiofónica en la emisora M24, en donde apuntó además que las críticas que recibe esta forma de hacer Gobierno por parte de la prensa uruguaya son lógicas en un país con "irrestricta libertad de prensa y empresa" en la que los dueños de los medios, "de otra clase social", se sienten "atropellados" cuando los obligan a "pagar mejores sueldos".
"Cuando uno contempla, por la información que viene del mundo, la situación difícil que afrontan los habitantes de muchos otros lugares, desde las perspectivas social, educativa y sanitaria dan ganas de decir hoy 'como el Uruguay no hay'", afirmó el mandatario, fiel a su estilo filosófico y campechano.
"Y esto no fue posible por magia sino porque la economía lo permitió, no solo porque hubo voluntad política, sino porque hubo un aumento constante y permanente de la inversión y con ello del empleo. A mayor ingreso, mayor consumo, y a mayor consumo, mayor grado de actividad, en términos relativos"
Mujica apuntó que lejos de ser unos "manijeros" (creídos) o considerarse "los inventores de la rueda o del agujero del mate", "por alguna razón, porfiada, Uruguay sigue dándose el gusto de ser el país más justo de esta injusta América Latina", resaltó.
El mandatario, un veterano exguerrillero tupamaro de 79 años, apuntó que ser el país que mejor reparte de la región, "aunque equivalga a decir" que son unos "campeones de cuarta porque este es el continente más desigual", se debe a sus tradiciones históricas y su construcción política.
Así, el presidente apuntó que por esas características, los salarios son la primera fuente de ingreso de los hogares del país y que por eso no se puede hablar "de justicia social, de equidad y de inclusión si no se tiene en cuenta la historia del salario".
Mujica resaltó en ese sentido que desde que la izquierda gobierna en el país hace diez años, estos sueldos se han incrementado de forma constante, con una subida del salario real cercana al 50 % en promedio.
"Y esto no fue posible por magia sino porque la economía lo permitió, no solo porque hubo voluntad política, sino porque hubo un aumento constante y permanente de la inversión y con ello del empleo. A mayor ingreso, mayor consumo, y a mayor consumo, mayor grado de actividad, en términos relativos", indicó.
En cuanto a la presión fiscal que reciben en Uruguay los salarios, una de las principales quejas y críticas que se realizan desde la oposición política, Mujica dijo entender a quienes dicen que no les alcanza el dinero o que les "sacan mucho".
"A esos les digo. Tienes razón, pero por suerte ganas mucho para que te saquen mucho, y triste sería que ganaras poco. A nadie le gusta que le apliquen la maroma fiscal y le quiten parte importante de aquello que considera es suyo, pero la construcción pública de una sociedad necesita el constante aporte de los más fuertes", culminó. EFE