SANTO DOMINGO, República Dominicana.-La Superintendencia de Electricidad declaró que emitió una resolución que obliga a las empresas generadoras que no cumplan con la producción de la energía acordada con anterioridad al despacho, al pago de una compensación económica por un monto de mil salarios mínimos.
La SIE dijo que espera que la nueva normativa contribuya a mejorar el servicio eléctrico a la ciudadanía, porque los generadores tendrán mayor cuidado en el mantenimiento de sus unidades para evitar salidas imprevistas.
“La Resolución SIE-535-2011 establece que la sanción se impondrá cuando la unidad esté disponible, pero con una capacidad distinta a la que se comprometió a entregar, siempre que la desviación sea superior a un 7 por ciento”, indicó.
“En este caso, la resolución obliga al pago de compensación económica, cuando haya una desviación superior al 10 por ciento, de parte de las empresas distribuidoras y usuarios no regulados (UNRs)”
La SIE explicó que la resolución obliga también a las distribuidoras a precisar con mayor esmero la previsión de su demanda para evitar pagos por desvíos costosos, lo que producirá un abastecimiento con mejor calidad de servicio y mejores precios.
“En este caso, la resolución obliga al pago de compensación económica, cuando haya una desviación superior al 10 por ciento, de parte de las empresas distribuidoras y usuarios no regulados (UNRs)”, argumenta.
“La normativa firmada por el Presidente de la SIE, ingeniero Juan Bautista Gómez, se enmarca dentro del cumplimiento de ciertos objetivos de alta prioridad para la SIE, como es la definición de señales que desestimulen el incumplimiento de los agentes en sus compromisos, tanto del lado de la oferta como de la demanda”, precisa.
De acuerdo con la resolución, las declaraciones de disponibilidad por parte de las empresas de generación que participan en el sistema eléctrico nacional, y de la demanda por parte de las empresas de distribución, son variables, y las desviaciones (de lo anunciado vs la realidad del despacho) tienen una incidencia directa en la formación de los precios en el mercado, en la compra de energía por parte de las distribuidoras y en los precios finales a los usuarios.