Washington, 17 mar (EFE/Alfonso Fernández).- La Reserva Federal (Fed) de EE.UU. inició hoy una nueva reunión sobre política monetaria con la inminente subida de tipos de interés de referencia como tema principal, en un debate que ya se ha acotado hasta el punto de que la duda es si se producirá en junio o septiembre.
El esperado comunicado a la conclusión del encuentro de dos días del Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed se divulgará el miércoles a las 14.00 hora local (18.00 GMT), y la aún más anticipada rueda de prensa de la presidenta del organismo, Janet Yellen, tendrá lugar a las 14.30 hora local (18.30 GMT).
Asimismo, el banco central de EE.UU. presentará su nueva actualización de las previsiones macroeconómicas.
La palabra clave que todos los analistas buscarán en la nota de la Fed es "paciente".
Yellen, en su comparecencia de febrero ante el Congreso, indicó que el organismo estaba preparado para eliminar esta referencia del comunicado, lo que supondría que la reunión de junio sería la primera apuesta para esta subida de tipos de interés, actualmente entre el 0 % y el 0,25 % desde finales de 2008.
Como argumentos, la presidenta de la Fed apuntó a la mejoría sustancial del panorama en EE.UU., y los datos de comienzo de año han respaldado esta visión de que la economía nacional se encuentra en una sólida senda de recuperación.
La tasa de desempleo de febrero cerró en el 5,5 %, una cifra no vista desde mediados de 2008; y la actividad económica se situó en 2014 en una tasa del 2,4 %, la más alta en cuatro años.
No obstante, la Fed cuenta con un doble mandato de fomento del pleno empleo y estabilidad de precios.
En este segundo aspecto es donde el banco central presenta más dudas, ya que el indicador de precios en EE.UU. se mantenido notablemente por debajo de la meta inflacionaria marca por la Fed de en torno al 2 %.
El último dato, correspondiente a febrero, lo ubicó en el 0,7 % interanual.
Yellen matizó que este descenso se debe a motivos "transitorios" como los bajos precios del petróleo, y afirmó que otros indicadores como el gasto del consumidor y el mercado inmobiliario apuntaban a un repunte en el medio plazo.
De este modo, el debate se ha reducido a saber si la subida de tipos se producirá en junio o se esperará algo más, hasta la de septiembre.
"La actual baja inflación parece exclusivamente vinculada a los precios del crudo (…) No obstante, esto no significa que EE.UU. vea una inflación cercana al 2 % en el corto plazo, debido a que la fortaleza del dólar y la falta de presión salarial mantendrá los precios controlados", afirmó a Efe Jacob Kirkegaard, investigador principal del centro de estudios Peterson Institute de Washington.
Es este contexto, a juicio de Kirkegaard, el que "permitirá a la Fed mantener los tipos entorno a cero por un poco más de tiempo", al apostar por septiembre como fecha de esta alza del precio del dinero.
La apreciación del dólar respecto a otras monedas como el yen japonés o el euro ha generado preocupación entre los economistas por los efectos negativos que genera sobre las exportaciones estadounidenses al encarecer los productos.
Tanto el Banco de Japón como el Banco Central Europeo (BCE) se encuentran inmersos en multimillonarios planes de estímulo monetario, para enfrentar su frágil situación económica, lo que se prevé impulse aún más el fortalecimiento del dólar.
Los mercados abrieron hoy a la baja expectantes ante el resultado de la reunión de la Fed y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, bajaba un 0,78 % a media jornada. EFE