JUANA MÉNDEZ, Haití.- La construcción de un centro logístico con toda la infraestructura necesaria para que el intercambio comercial entre la República Dominicana y Haití pueda desarrollarse en un marco de formalidad y seguridad, con eficientes controles aduaneros, es uno de los objetivos del Consejo Económico Binacional Quisqueya (CEBQ).
Como parte del proyecto piloto a implementarse en ambos lados de la frontera, se contemplan inversiones por unos 70 millones de dólares -US$35 millones en Dajabón y la misma suma en Juana Méndez- en tecnología, controles y seguridad portuaria para el trasiego y almacenaje de mercancías.
El empresario Juan Bautista Vicini explicó que uno de los objetivos que se ha planteado el CEBQ con esta inversión es apoyar el comercio formal en la frontera domínico-haitiana.
“Además desde ese centro logístico de la frontera, se podrá transitar desde ahí hasta el Puerto de Manzanillo para exportar productos que vengan de CODEVI u otras operaciones industriales textiles del lado dominicano”, sostuvo Vicini, representante y uno de los principales impulsores de la iniciativa de desarrollo fronterizo, que incluye a empresarios de ambas naciones.
Esta zona logística proveerá a la frontera binacional de “un espacio formal” para el tráfico comercial, “donde las aduanas puedan tener controles adecuados e infraestructuras necesarias” para el tránsito de vehículos pesados con mercancías y el acopio seguro de los productos.
En esta misma dirección se contempla invertir alrededor de 9 millones de dólares en la adecuación del estratégico Puerto de Manzanillo, de Montecristi.
Vicini indicó que otro componente importante de esta etapa piloto del CEBQ es la construcción de viviendas para los trabajadores de las fábricas ubicadas a ambos lados de la frontera, que podrán ser adquiridas pagando una mensualidad de entre 30 y 39 dólares.
Para que los obreros puedan sufragar el costo de las viviendas, e impulsar este modelo de desarrollo sostenible, se ha contemplado la instalación de paneles solares en los techos de cada inmueble, que servirán también para suplir la demanda energética de las fábricas.
“O sea que al final la energía eléctrica que va a consumir el parque producida por esos paneles fotovoltaicos va a poder pagar no solamente el financiamiento de los paneles mismos, y también el financiamiento” de las casas, que serán 365 en cada lado de la frontera y tienen un costo unitario de unos 40 mil dólares.
La idea del proyecto piloto “es comprobar una sinergia entre todos esos componentes de la cadena de valor y entonces con eso comprobar el modelo de negocios y levantar fondos en los mercados de capitales locales e internacionales, para replicar ese modulo de desarrollo una y otra vez", expuso el empresario en el marco de la inauguración de la planta textil Manzava Hispaniola, una nueva operación localizada en el parque industrial CODEVI.