SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Las interrogantes, dudas y denuncias en torno a la licitación auspiciada por la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) para el Proyecto Termoeléctrico de Punta Catalina, adjudicada en noviembre pasado al consorcio Odebrecht-Tecnimont, continúan surgiendo con el paso de los días.
El debate retornó con fuerza a los medios a raíz de la medida cautelar dispuesta por el Tribunal Superior Administrativo (TSA), el pasado 13 de agosto, a favor de las firmas China Gezhouba Group Corporation (CGGC) y Consorcio IMPE, que impugnaron los resultados del proceso.
El TSA dictaminó suspender la licitación aduciendo, entre otras premisas, una “inconsistencia” entre la suma de US$2,040 millones ofertada por Odebrecht-Tecnimont, y el tope consignado para la obra en el presupuesto nacional, de US$1,500 millones (Alrededor de RD$65 mil millones).
Otro hecho que añade más ruido es el “memorando de entendimiento”, que dio a conocer el periódico Acento.com.do, en el que la firma Ozoria & Asociados -del ingeniero Carlos Ozoria- pactó con las licitantes Posco Engineering & Construction y la Constructora Andrade Gutiérrez “interponer sus mejores esfuerzos” para lograr la jugosa concesión.
Estas “irregularidades” habrían ocasionado –según el ejecutivo de IMPE- que dos miembros del Comité de Licitación, Ramón Antonio Flores e Isidoro Santana, no firmaran "el documento que daba como único precalificado en la parte técnica a Odebrecht-Tecnimont", en enero del 2014
Ozoria recibiría, de entrada, la suma de US$2 millones en efectivo, y otros US$150 millones de consumarse el objetivo. Las “irregularidades” atribuidas al proceso y una alegada propuesta para que abultaran el valor de su oferta, habrían causado malestar en la empresa Gezhouba Group, propiedad del Gobierno de China Popular.
Así lo indica con lujo de detalles el ingeniero Raúl Cabrera, accionista del Consorcio IMPE, contraparte local de la corporación china.
En declaraciones al portal Acento.com.do, Cabrera sostuvo que Ricardo Cheaz le hizo de manera verbal la “oferta”, supuestamente “a nombre” del vicepresidente ejecutivo de la CDEEE, Rubén Jiménez Bichara. “Luego de conocerse la oferta de Odebrecht, viene adonde mí Ricardo Cheaz y me dice ‘Bichara te mandó a decir que si ustedes pueden subirle 200 millones (A su oferta) y llevarlo a 1,100 millones” de dólares.
Según Cabrera, Cheaz le planteó otros “cuatro o cinco puntos: que los chinos dijeran que (las plantas) venían con especificaciones y estándares americanos, que venían con un 100% de financiamiento… otra cosa era que los chinos trajeran éllos esa oferta, subiéndole eso”.
“Como una hora después, me vuelve a llamar (Cheaz) y me dice que hay que subirle US$100 millones más y lo llevemos a US$1,200. “Es que hay un compromiso de US$300 millones”, asegura que le dijo el supuesto emisario de Bichara, sin darle mayores detalles. Cabrera admite que, aunque lo vio “difícil”, tratándose de una empresa del Gobierno chino, tramitó esa misma noche la proposición a ejecutivos de la Gezhouba, quienes la habrían rechazado de plano.
“Los chinos dijeron que no; me dijeron ‘de la única forma que nosotros volvemos a Santo Domingo es que el Presidente de la República nos mande a buscar, y hagamos entonces un financiamiento de Gobierno a Gobierno”. Asegura que en ese momento fue que optaron por la vía judicial, y que evalúan iniciar otro proceso, en el plano penal, contra el resultado de la licitación. “Ahí se están repartiendo comisiones por US$500 millones (…) por eso es que tú ves que lo defienden con tanta rabia (…) que hablan de un supuesto boicot”, dijo el gerente general de IMPE.
Reportes de prensa de la época identifican a Ricardo Cheaz, a quien se le atribuye ser un hombre cercano al senador Félix Bautista, como presidente del “Movimiento Chinos con Danilo”, durante la campaña electoral del 2012.
Más de US$80 millones en "alimentación, hielo, viajes…"
Cabrera mostró una comunicación de la Gezhouba Group y el Consorcio IMPE, enviada el 6 de diciembre del 2013 al presidente Danilo Medina, a Jiménez Bichara, entre otros altos funcionarios, en la que solicitan “investigar” el proceso.
Entre otras “anomalías”, señalan que partiendo del monto contratado con Odebrecht-Tecnimont el costo “de un megavatio instalado en las plantas de carbón asciende a 3.4 millones de dólares, mientras ese mismo megavatio ofertado por la compañía china CGGC tiene un valor de 1.3 millones de dólares”.
La oferta ganadora de la licitación –fechada el 8 de octubre del 2013, copia de la cual tiene este portal- estaría “sobrevalorada” en cientos de millones de dólares, afirma Cabrera. Subraya, en este orden, la suma de US$8 millones 357 mil 930 por concepto del “sistema de alumbrado” de la obra, así como los renglones “otros edificios”y “gastos en grúas de izaje”, valorados en más de US$49 millones y US$121 millones, respectivamente.
Otras componentes según Cabrera “evidentemente alterados, y que no tienen que pasar por Aduanas” figuran como “servicios” y “servicios de ingeniería” y “movilización”, con asignaciones de US$102,441,915 y US$63,062,214 millones. En tanto que, para “Otros gastos (Alimentación, hielo, viajes, etc.)”, se consigna la suma US$80,788,573.70 millones. La oferta económica del binomio Gezhouba-IMPE para el proyecto fue de US$900 millones, la más baja entre las cuatro finalistas y US$1,140 millones menos que la de Odebrecth (US$2,040).
Los independientes no firmaron
Cabrera señala que la firma Norberto-Odebretch “debió ser descalificada”, entre otras razones, “porque tenía problemas judiciales en Brasil, y esa documentación fue depositada por nosotros y por Posco (Posco Engineering & Construction)”.
Sostiene que “a nueve meses de ganar la licitación, Odebrecht aún no tiene el financiamiento” para construir las plantas, pero que por este mismo motivo fueron descalificas más del 30% de las empresas que licitaron, que fueron más de cincuenta. Afirma que el grupo Gezhouba-IMPE fue descalificado por fallas corregibles dentro del “período de subsanación” contemplado en la licitación (Del 18 al 24 de junio, 2013), como problemas de traducción del mandarín al inglés y al español. La evaluación técnica y económica del proceso corrió a cargo de la firma auditora Stanley Consultants.
Estas “irregularidades” habrían ocasionado –según el ejecutivo de IMPE- que dos miembros del Comité de Licitación, Ramón Antonio Flores e Isidoro Santana, no firmaran "el documento que daba como único precalificado en la parte técnica a Odebrecht-Tecnimont", en enero del 2014. “Los únicos miembros independientes (Del Comité) no firmaron, y los demás que firmaron son todos funcionarios, empleados de la CDEEE”, dice Cabrera.
Además de Santana y Flores, el Comité lo conforman Milagros Santos, Ángel Casado, Carlos Jeremías Santana y Rossana Montilla, esta última hermana de la primera dama, Candy Montilla de Medina.