Santo Domingo, República Dominicana. – El Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (Mepyd) aseguró este lunes, en respuesta a ciertos cuestionamientos al discurso presidencial del 27 de febrero, que las estadísticas oficiales y de organismos internacionales prueban que en los últimos cinco años en el país han salido de la pobreza 240 mil personas por año.
Esto se explica en la caída de 14.2 puntos porcentuales en la tasa de pobreza monetaria que pasó de 39.7% en 2012 a 25.5% en 2017, contexto en que el número de personas en pobreza monetaria descendió de 3.8 millones en 2012 a 2.6 millones en 2017.
El Mepyd recuerda en un comunicado que después que el país registrara un largo periodo de avance, la crisis bancaria de 2003-2004 disparó abruptamente el nivel de pobreza que afectaba antes de ésta al 32.4% de la población, y que alcanzó a casi la mitad en su momento más crítico.
La institución indica que cuando se restableció la normalidad entre 2004 y el 2006 la pobreza volvió a bajar algo, pero permaneció durante mucho tiempo sobre el nivel anterior a la crisis, a pesar del acelerado crecimiento económico que vivió el país.
“No es motivo de orgullo que todavía más de 2.5 millones de dominicanos sufran de tales carencias. La superación de este mal es el primero de los Objetivos de Desarrollo Sostenible al 2030, a los que el país se comprometió en el seno de las Naciones Unidas y en los que está empeñado el Gobierno”
Rememora que no fue sino hasta 2015 cuando se restablecieron los niveles de vida previos a la crisis, hasta que finalmente para el 2017 la tasa de pobreza monetaria se colocó notablemente por debajo de los niveles vigentes quince años atrás.
“No es motivo de orgullo que todavía más de 2.5 millones de dominicanos sufran de tales carencias. La superación de este mal es el primero de los Objetivos de Desarrollo Sostenible al 2030, a los que el país se comprometió en el seno de las Naciones Unidas y en los que está empeñado el Gobierno”, recuerda la institución.
El Ministerio indicó además que el porcentaje de dominicanos en situación de indigencia también ha venido bajando y citó como dato más reciente el 3.8% en 2017, después de haber rondado el 8% en el año 2000 y de haber sido duplicado durante la crisis bancaria.
“Para confirmar o desmentir estos datos se han hecho otras mediciones, como el índice de pobreza multidimensional, que incluye diversas variables de bienestar diferentes al ingreso, así como también el índice de calidad de vida o de necesidades básicas insatisfechas, y todos coinciden en la misma tendencia”, subraya el Mepyd.
De ahí que asegure que todas las informaciones disponibles permiten concluir que, independientemente del método de medición, la pobreza se ha reducido en los últimos cinco años.
El Mepyd indica que otra forma de análisis es a través de la clasificación de los hogares en estratos sociales a partir de determinados montos de ingresos tomados convencionalmente de una metodología del Banco Mundial y del PNUD, que dividen a la población en pobres y clase media y, en medio de ellas, los “vulnerables”, un grupo muy extenso con ingresos que aun cuando superan el de los pobres no llegan a clase media.
Esta metodología define a los hogares pobres como aquellos con ingreso per cápita inferior a cuatro dólares diarios o RD$17,636 mensuales por hogar de cuatro miembros, a noviembre de 2017. Los de clase media, con ingresos per cápita de diez dólares diarios o equivalentes al tramo de RD$ 44.089 y RD$ 220,444 mensuales por hogar de cuatro miembros y, finalmente, los vulnerables, hogares con ingresos per cápita de entre cuatro y diez dólares diarios, equivalentes al tramo de RD$ 4,809 y RD$ 11,022 mensuales por persona o entre RD$ 17,636 y RD$ 44,089 por hogar de cuatro miembros.
El Ministerio de Economía observa a seguidas que se esté de acuerdo o no con los montos citados, es a partir de dichos criterios que siguiendo las definiciones del Banco Mundial el país vuelve a ser considerado de clase media.
“La razón es que la franja de clase media es más amplia que la de pobres. La clase media en 2017 alcanzó un 30%, después de aumentar 7.4 puntos porcentuales en relación con el 2012, y esto no hizo más que restablecer los niveles previos a la crisis bancaria”, destaca el Mepyd en su comunicado.
En cuanto al grupo denominado “vulnerables”, la institución destaca que es el más amplio de todos y que en los últimos cinco años aumentó 6.2 puntos porcentuales.
“Algunos analistas han interpretado este aumento como negativo, lo cual sería cierto si hubiese ocurrido a costa de una reducción de la clase media, pero debe considerarse positivo cuando su aumento (como ocurrió en el país) es por movilidad desde la clase pobre”, sostuvo el Ministerio.
El Mepyd comentó que en la búsqueda de explicaciones a los factores determinantes de la caída de la pobreza realizó análisis mediante diferentes modelos, el primero a través de la descomposición del cambio en la tasa.
Informó que el resultado de ello fue la reducción de 2012 a 2017 debida a efectos positivos combinados entre el aumento en el ingreso promedio de los hogares y el mejoramiento en la distribución del ingreso.
En términos concretos, de los 10.4 puntos porcentuales que cayó la tasa de pobreza de 2012 a 2016, 9.4 puntos obedecen a mejoría en el ingreso promedio y 1.4 puntos a mejoría en su distribución.
“En el último año, de la reducción de 3.2 puntos en la tasa, el aumento del ingreso explica 1.9 y la distribución 1.3 puntos”, destaca.
Un segundo modelo a partir de la descomposición del ingreso del hogar por fuentes de ingreso reveló que el ingreso laboral fue el principal determinante del crecimiento del ingreso de los hogares.
Cita en apoyo que en el sector público se realizaron aumentos en sectores tan amplios como los de educación, salud, fuerzas armadas y policías y al interior de algunas instituciones públicas, y en el sector privado también, impulsados por los incrementos en las tarifas de salarios mínimos por encima por primera vez de la inflación acumulada.
“Tales aumentos también se confirman con los datos de la Dirección General de Impuestos Internos y de la Tesorería de la Seguridad Social, así como estudios de salarios realizados por firmas privadas”, coteja el Mepyd en su comunicado.