SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El empresario Celso Marranzini declaró este jueves que no es cierto que el sistema eléctrico disponga de una sobreoferta de generación muy por encima de la demanda nacional, como ha afirmado en reiteradas ocasiones la Asociación Dominicana de la Industria Eléctrica (ADIE), entidad que representa a las plantas generadoras.
“No estoy de acuerdo en que haya generación de sobra. Realmente aquí para el 2018 hace falta generación, mucha de la generación de sobra que se pueda decir en este momento es generación cara, y nosotros tenemos que bajar el costo de la energía”, dijo al periódico Acento.com.do el ex titular de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
Explicó que de acuerdo con el Plan de Expansión 2010-2030 trazado durante su gestión al frente de la CDEEE (2009-2012), en el sistema hacía falta la incorporación de 1,500 megavatios adicionales, a fin de poder suplir toda la demanda.
Marranzini ponderó la importancia estratégica del proyecto de las dos plantas a carbón del proyecto Punta Catalina, que construye la CDEEE con miras a diversificar y ampliar el parque de generación, y producir una tendencia a la baja en el costo de la energía.
“Además de eso hay que sacar las plantas obsoletas. No podemos seguir con una matriz en donde usted tiene una generación con fuel oil de casi un 38%, entonces realmente eso hay que sacarlo”, del sistema interconectado, puntualizó.
Manifestó, no obstante, que un aspecto prioritario del denominado Pacto Eléctrico debe ser también eficientizar la distribución y facturación del servicio eléctrico.
“Estoy de acuerdo con eso, creo que es todo un plan integral; aquí no se puede hablar de electricidad sin pensar en la transmisión, sin pensar en la distribución, sin pensar en la generación”, dijo el empresario antes de participar en el almuerzo anual de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD).
De acuerdo con la ADIE, a septiembre de este año la capacidad instalada del sistema se situó en 3,687.55 megavatios, mientras que la demanda máxima que se ha reportado ha sido de unos 1,835 megavatios.
Plantas de carbón no son contaminantes
Marranzini consideró que están equivocados los sectores que se oponen a la edificación de las plantas de carbón en Baní, provincia Peravia, alegando eventuales daños al medioambiente de la zona.
“Hay quienes entienden que son contaminantes, pero esas plantas estarán concentradas en un sitio donde hay controles ambientales, y la tecnología de hoy de carbón no es la misma de las (plantas) Itabo, que eran de diesel y se convirtieron a carbón, y están muy controladas”, explicó.